Un total de 127 deportistas, de 15 disciplinas diferentes, representarán a España en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro, los primeros en un país de Sudamérica que comienzan este miércoles, 7 de septiembre y que se prolongarán hasta el día 18.

El equipo paralímpico que representa a España en Río de Janeiro está formado por 127 deportistas, de los cuáles 111 tienen discapacidad y los otros 16 son guías, porteros y pilotos y de ellos un total de 19 son deportistas de la Comunitat Valenciana de los que 13 pertenecen al Proyecto FER. A ese número hay que sumarle otros 74 miembros entre médicos, entrenadores, fisioterapeutas, mecánicos, traductores, personal de apoyo y oficina. En total, 201 personas. De los 127 deportistas españoles que acuden a Río 28 son mujeres, lo que representa un 25,2%.

En la cita brasileña, España participará en quince de las veintidós disciplinas del programa paralímpico: atletismo, baloncesto en silla de ruedas, boccia, ciclismo, fútbol-5 para ciegos, judo, halterofilia, natación, piragüismo, tenis de mesa, tenis en silla de ruedas, tiro con arco, tiro olímpico, triatlón y vela.

España acude con un equipo en el que destacan grandes figuras internacionales como el valenciano David Casinos. Ha participado en cuatro Juegos Paralímpicos y ha obtenido cuatro medallas de oro, tres en lanzamiento de peso y una en disco y ahora quiere despedirse de los Juegos con otro oro. Otra de las grandes protagonistas españolas será la nadadora zaragozana Teresa Perales, la deportista española con más medallas en unos Juegos, ya que suma 22 (6 de oro, 6 de plata y 10 de bronce) en las últimas cuatro ediciones.Por su parte, la valenciana Mónica Merenciano también buscará su cuarta medalla paralímpica tras los bronces de Atenas, Pekín, y Londres. La nadadora catalana Sarai Gascón; el subcampeón del mundo de maratón, Alberto Suárez; la también nadadora Michelle Alonso; el sevillano Álvaro Varela (tenis en silla)y la triatleta Susana Rodríguez, son sólo algunos de los deportistas españoles con más opciones de lograr medalla en Río. La ceremonia inaugural, en el estadio Maracaná, contará con un montaje del brasileño Vik Muniz, así como con un espectáculo de samba y exhibiciones de deportistas paralímpicos. «A diferencia de la inauguración de los Juegos Olímpicos, nosotros tuvimos más libertad. Será una ceremonia más humana y multisensorial», explicó Marcelo Rubens Paiva, uno de los directores creativos.

Los paralímpicos toman el relevo

Solo 17 días después de que el fuego sagrado se apagara en Río de Janeiro, la capital carioca volverá a ser foco de atención mundial gracias a la inauguración de los Juegos Paralímpicos 2016. Los más universales y multitudinarios de la historia. Por delante, 11 días de competición con 4.350 participantes (record de inscritos, por delante de los 4.237 de Londres 2012), 175 países representados, 22 modalidades deportivas, 528 pruebas. Tras salvar con dignidad la organización de los Juegos Olímpicos, y tras minimizar el impacto de la grave crisis económica, social y política que les afecta, Río de Janeiro y Brasil ponen a prueba, de nuevo, su capacidad para salvaguardar su imagen y prestigio internacionales con la celebración de los Juegos Paralímpicos. La cita paralímpica ya no presenta el gigantismo del evento que le ha precedido. Y más, con los recortes que se han aplicado a última hora ante la asfixia financiera que ha sufrido el Comité Organizador. Por ejemplo, la disminución del despliegue humano ideado en un principio, la reducción de los servicios de transporte para deportistas y familia paralímpica... Phil Craven, presidente del Comité Paralímpico Internacional, calificó la situación de Río 2016 como «la mayor crisis de la historia de los Juegos Paralímpicos».