El Levante UD FS sigue asentado al frente de Primera División gracias a su segundo triunfo consecutivo, el primero en El Cabanyal, pabellón que aspira a convertir en un fortín donde asentar la permanencia, paso fundamental para soñar con cotas mayores. El conjunto de David Madrid, que llegaba pletórico tras su goleada inaugural en Gran Canaria (1-10), no tuvo tantas facilidades ante un correoso Aspil Vidal Ribera Navarra, a pesar de tener en las gradas a una parroquia con la que se reencontraba después de meses desde los festejos por la permanencia. Los visitantes, necesitados de puntos por la dura derrota ante el FC Barcelona Lassa (0-5), plantearon batalla y no se acoquinaron con el tempranero gol de Sena de fuerte disparo, y otro chut de Tripodi a la madera. En el minuto 13, Hamza empató con un gol de clase ante Prieto, lo que equilibró el duelo no solo en el electrónico sino también en las ocasiones.

Tras la reanudación, en la que el Levante volvió a recuperar la iniciativa, Sergio G. adelantó a los suyos contrapronóstico. Cuesta arriba, los de David Madrid echaron el resto y diez minutos más tarde restablecieron la igualada por medio de Cecilio, con siete minutos por delante para asegurar algún punto más. La locura se desató a uno del final, cuando una buena asistencia de Pedro Toro la empujó Márquez al fondo de la red desde la línea de meta. Ni con Sepe de portero jugador pudo el rival cambiar ya su destino. Segunda victoria de un Levante UD FS que por fin deja atrás los finales de infarto que le lastraron durante el pasado curso.