El Estadio Ciutat de València ya con las porterías de rugby instaladas y su impecable césped después de dos partidos en menos de 24 horas impresionaron este sábado a los dos mejores equipos del rugby nacional. El VRAC Quesos Entrepinares, con el valenciano Àlvar Gimeno en sus filas, y el Silverstorm El Salvador, pisaron por la tarde el césped del coliseo del Levante UD, junto al trofeo de la Copa del Rey por el que lucharán este domingo a partir de las 12:30 horas (web de rtve.es en directo, y en diferido en Teledeporte a las 16:00 horas).

También lo pisó el popular chef televisivo Alberto Chicote, exjugador de rugby y que hará el saque de honor en la tercera final consecutiva que acoge un estadio de fútbol. No se alcanzarán por poco los 20.000 espectadores que llenaron el José Zorrilla de Valladolid los dos últimos años, pero València cumplirá con creces con cerca de 17.000 aficionados.

Los cuatro equipos de la capital del Túria con sus respectivas canteras, y seguidores de toda la Comunitat Valenciana, la tercera de España con más licencias, asistirán a #UnaFinalDeTodos, como se ha presentado esta edición, que cuenta con el respaldo no solo del club granota sino también de la Fundación Trinidad Alfonso. Algo menos de un millar serán vallisoletanos. Todos podrán disfrutar desde las 9:30 y hasta las 20:00 horas de una Fan Zone anexa al estadio con actividades lúdicas y familiares en torno al rugby y sus valores.

En lo deportivo, se enfrentan dos históricos, dos de los equipos más laureados de los últimos años. No en vano, los 'chamizos', oficialmente los locales, buscan su octava Copa del Rey (la última la conquistaron en 2016 ante el mismo rival que ahora), y los queseros su quinto título. Un duelo para el que nadie quiere confiarse y al que llegan con sus mejores hombres, e incluso con un refuerzo de última hora, el apertura británico Sam Katz, que regresa a las filas colegiales.

Así lo manifestaron tanto el técnico Juan Carlos Pérez y el capitán 'chamizo' Fernando González, como el entrenador quesero Diego Merino y su capitán Ángel Fernández. Ni los primeros se sienten locales ni favoritos, ni los segundos esperan favores del público por tener al único jugador valenciano de la final.

Creen que la grada, entendida, premiará el esfuerzo de todos por igual en un ambiente tan espectacular como el escenario, sobre el que no escatimaron elogios y que recibía ayer los últimos retoques con las porterías, la cartelería y el borrado de las líneas de fútbol y su sustitución por las correspondientes al balón oval.

Por estadística reciente, el VRAC parte como favorito. Sólo ha perdido este año un partido, contra la Santboiana, y ha ganado los dos derbis pucelanos. Ha conquistado además un nuevo título de la Liga Heineken y superado la barrera de los cien puntos, con 19 ensayos de John Wessel Bell. Enfrente tienen a un equipo que atesora ocho Ligas, siete Copas del Rey, cinco Supercopas y cinco Copas Ibéricas, y que esta campaña ha liderado las estadísticas de ensayos anotados, de menos marcas recibidas y menos golpes de castigo encajados. Capitanes y entrenadores esperan un resultado corto, pese a tener dos de las mejores delanteras de España.

Actividades suspendidas en Valladolid

En Valladolid se había programado una jornada festiva, con una pantalla gigante en la Acera de Recoletos y actuaciones musicales para permitir a los aficionados que no pudieran desplazarse a València seguir el choque, pero todas las acciones fueron suspendidas por el mal tiempo que se prevé para este domingo.

Habrá alternativas, ya que las sedes de ambos equipos van a ofrecer el encuentro, al igual que otras zonas de ocio, con el fin de que los seguidores vallisoletanos disfruten de un día especial, en el que uno de los equipos de la ciudad traerán de València un nuevo título para sus vitrinas.

En València, en cambio se siente #LaFinaldeTodos como una fiesta del rugby que espera cerca de 17.000 espectadores en las gradas del Ciutat. Desde el viernes, y hasta este domingo, los seguidores tienen una Fan Zona lúdico educativa para toda la familia.