El empate de ayer contra el colista es indudable que no entra por los ojos, pero conforme está el equipo pesa más el punto sumado que los dos que volaron. Las bajas sí que son excusa. Más si fuera del equipo coinciden cinco titulares. La realidad es que el Levante cotiza a la baja, que está muy justo y que en días en los que nadie oposita a la victoria vale no perder. Ni era normal hacer un pleno sobre 21 puntos ni la pobre media de las últimas jornadas da la medida de un conjunto que ha sumado 31 en la primera vuelta. Un gran colchón.

Koné, qué gran suerte

En momentos así, y pese a lo arriesgado que es darle tanto carrete, ver en el campo a Koné es un alivio. El marfileño no destaca por su olfato goleador, pero es una suerte que el hombre más top del equipo esté tan responsabilizado y tire del carro. Lo cierto es que las pocas oportunidades de victoria que tuvo el Levante pasaron por sus botas. De chapeau.

En el término medio

Juan Ignacio Martínez está tratando de capear el temporal con un trivote. Sin chispa por las bandas, la parte buena es que el Zaragoza sólo dispuso de una ocasión clara. La negativa, que el Levante también. Le faltó claridad, abusó del fútbol directo y no llegó a carburar casi nunca. Todo ello a cambio de proteger bien a Munúa. Una cosa por la otra. Los de Manolo Jiménez fueron un equipo muy pobre, pero eso no quita para echar de menos a futbolistas que aportaban tanto en el ataque como Valdo, Barkero y Juanlu.

Cambios teledirigidos

Xavi Torres y Koné llegaron justos y no terminaron el partido. El marfileño hizo el esfuerzo extra en Mestalla, mientras que al valenciano le costó mantener el músculo. Es otra realidad a la que se está enfrentando el equipo en este periodo de vacas flacas en el que además de jugar con alfileres hay que dosificar lo posible para evitar una fractura mayor. También Rubén venía de una lesión.

Cabral está creciendo

No fue el día de muchos jugadores, entre ellos Farinós, llamado a ser el diapasón del juego. Como él, hubo otros lejos de su nivel o que no acaban de dar el paso adelante ahora que disponen de las oportunidades que reclamaban. Sin embargo, respecto a estos últimos sí hay uno que va a más. A escasas jornadas de que Nano se despida, Cabral le está cogiéndo el aire al equipo y aportando además un extra de carácter que no se hace de menos. Buena noticia el día que faltaba en el eje de la zaga un puntal como es Ballesteros.

Ya está aquí el primero

De haber tenido el tránsfer, Botelho habría estado en el césped en vez de en la grada. Si no pasa nada raro debutará ante el Valencia. En verano prefirió Vallecas por temor a la competencia, justo lo que en la banda izquierda falta ahora a la espera de que llegue el extremo zurdo que el club tiene encarrilado. ´Parabens´ y que Juan Ignacio gane su apuesta.

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