El Levante anunció esta semana que una temporada más recuperará El Club de los Niños, su particular herramienta de evangelización en los colegios. La apuesta por los más jóvenes es un rasgo distintivo de la política social de los últimos años, en los que como siempre se ha dicho se invierte a medio y largo plazo con iniciativas como esta, sin duda de las más interesantes. Sin embargo, la novedad este año es que además del futuro de la grada se le ha dado un nuevo enfoque al del campo. Por un lado, con la llegada de Tito se ha virado hacia un perfil de plantilla en la que abundan jugadores jóvenes pero con sobrada experiencia, lo que asegura una buena base para cuando se ascienda y en la que destacan apuestas por talentos como Roger y Jason que estaban ya aquí. Por el otro, y aquí radica la principal novedad, se está llevando a cabo una transformación radical en la cantera con el eslógan de valores y la creación de comisiones, entre ellas la que se encarga de castigar de forma severa, incluso con la expulsión, a los canteranos con ´faltas de comportamiento´, sin excepciones y sean lo buenos que sean.

Sentido adiós de un técnico

Las dos ´fugas´ de la escuela

Hablando de niños y de la cantera, esta ha sido también la semana de la salida de uno de los técnicos más importantes de la estructura como es Andrés Pardo, antiguo subdirector de la escuela y tanto cazador como cuidador de talentos. Aunque con un encuadre diferente a la de Salavert, se trata de la segunda baja en el organigrama. Hay quien dice que ha sido todo estrategia de Tito, que aun así intentó por todos los medios reconvencer a Pardo, y hay quien se queja también de que así se va a perder un año de trabajo. El tiempo dirá, pero lo cierto es que el director deportivo no da puntada sin hilo y que los dos, enfrentados entre sí en la penúltima etapa, han durado 20 minutos en el mercado. Uno vuelve al Villarreal para enfado de los que ven que el submarino ha tocado a un técnico con contrato en vigor. Y el otro cambiará de rol pronto, aunque es curioso que vaya a pasar de jefe de Buñol a dedicarse sólo al fútbol profesional.

En su caso, por cierto, el Levante se ha protegido para que no rebotara a algún rival.

A almería con el caso Verza

Sin faltas de comportamiento

Prueba de fuego este domingo en Almería con Roger como único punta de lanza, lo que refuerza la idea de que tal vez la plantilla ande corta en ataque. Y regreso morboso, si va convocado, de Verza al estadio en el que le gustaría jugar cada dos semanas. El de Beniel, y no lo oculta, anda fastidiado con su situación, pero por ahora ´faltas de comportamiento´, ninguna.

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