Antes de escribir me gusta echarle un ojo a lo que hemos publicado durante la semana, revisar alguna que otra conversación de wasap, refrescar el listado de las últimas llamadas y darme un último garbeo por las redes sociales para ver cómo respira ese mundo virtual que a mí me parece cada vez más de carne y hueso. Sin embargo, la verdadera clave de todo este ritual pre-escritura es dedicarle un rato a escuchar, por supuesto café en mano, a las personas que saben en cada momento qué pasa. Auténticos oráculos que, como si lo leyeran en los posos, casualmente también suelen clavar lo que va a pasar. Doy este rodeo para acabar contando que uno de esos futurólogos acaba de insistirme en la tendencia conservadora del Levante UD, tanto del club en sí como del entorno que lo rodeamos, por agarrarse «a lo que lleva funcionando cinco minutos». Pronóstico: Si los del Getafe y el Eibar hubiesen sido los últimos partidos de la temporada, Paco López ya estaría renovado y blindado para Primera.

Terremoto y temblores

Puedo olerme alguna que otra cosa, pero desconozco las intenciones de un club que, como hacen todos, vive pendiente de los resultados y de cómo en función de ellos cotizan los futbolistas, entrenadores y directores deportivos. No tengo ni idea, siendo franco, de qué va a pasar, y eso que según opina mi oráculo muchos de los que consideraban que dos partidos eran una eternidad, ahora estarían por la labor de que Paco sea el próximo técnico si el equipo se salva y termina holgado. Es una afirmación temeraria, seguro, sobre todo porque con la destitución de Muñiz el suelo tembló tanto que no hubo nadie que no se tambaleara. Pero, sin ser yo de los que leen en los posos del café, a mí la idea no me parece en absoluto descabellada ni para nada la veo con malos ojos. Al revés.

Made in 'Sampacoli'

Si en las próximas jornadas se confirman las correctísimas sensaciones de estos dos primeros partidos en los que el optimismo va más allá de los resultados (lo normal habría sido una derrota y un empate, para qué engañarse), el Levante va a tener que estar muy seguro de lo fiable que pueda ser otro entrenador a la hora de mejorar al que ahora tiene. Si algo ha fallado aquí una y otra vez ha sido precisamente eso, que buenos técnicos no hayan casado con las singularidades de este club. A ver con Paco.

Más opiniones de Rafa Marín.