El español David Ferrer, que hoy cerró su camino en la Copa de Maestros con tres derrotas en tres partidos, lamentó el cansancio con el que llegan los primeros tenistas del ránking al termino de la temporada y afirmó que jugar cada año la Copa Davis es un lastre en el calendario.

"La Copa Davis no se puede hacer cada año. Mi propuesta sería hacerla cada dos años, o sobre todo que los que hacen final pasen (de ronda), no empezar tan pronto", afirmó en rueda de prensa el alicantino, que en el torneo que cierra el curso en Londres ha caído ante su compatriota Rafael Nadal, contra el checo Tomas Berdych y frente al suizo Stanislas Wawrinka.

Ferrer ha disputado siete campeonatos consecutivos en las últimas siete semanas y ha reiterado durante la Copa de Maestros que el cansancio le ha impedido mostrar su mejor tenis sobre el tapete azul del O2 Arena de la capital británica.

"Me sabe mal no haber ofrecido la mejor versión de David Ferrer. He estado lejos de mi tenis y eso es un poco frustrante en ciertos momentos", afirmó el alicantino, que hoy plantó batalla durante la primera mitad del encuentro ante Wawrinka pero se vio arrastrado por el suizo en el tramo final del partido (6-7(3), 6-4 y 6-1).

El español resaltó que en su opinión la Davis no debe disputarse todos los años: "Pero como hay tantos intereses por parte de las federaciones, y por parte de la ITF (Federación Internacional de Tenis), que son los que realmente ganan dinero, al final lo pagan los jugadores", sostuvo.

"Nosotros salimos perjudicados, sobre todo en tema de lesiones, pero también porque la gente no entiende que no quieras jugar por tu país, cuando realmente no es eso ", apuntó Ferrer.

"Cuando juego en cualquier torneo represento a mi país. En la Davis esta más acentuado, pero en esta vida te juegas tu físico y tu carrera tenística", afirmó el español, que todavía no ha planeado su calendario de cara a la próxima temporada pero que, a pesar de todo, no se descarta para jugar la Davis.

"La ATP mira sus intereses, la ITF mira sus intereses, y al final se miran los intereses del jugador, pero no al cien por cien. Al final perdemos todos, por el espectáculo, porque los jugadores buenos llegan cansados a final de año", insistió el número tres del mundo.

Con todo, Ferrer asumió esta semana la "culpa" por haber disputado tantos torneos en el tramo final del año, y hoy reiteró que "no sabía que" se "clasificaría para tres finales consecutivas, Estocolmo, Valencia y París".

A pesar de que las semifinales de la Copa de Maestros estaban cerradas para Ferrer desde que perdió el miércoles ante Berdych, hoy saltó a la pista sabiendo que una victoria ampliaba sus posibilidades de acabar el año como número tres del mundo, la mejor posición en el ránking de su carrera.

La derrota ante Wawrinka significa que el argentino Juan Martín del Potro podría arrebatarle ese tercer puesto si mañana gana al suizo Roger Federer y después se impone en una eventual semifinal de la Copa de Maestros.

Con 31 años, Ferrer cierra en Londres la segunda mejor temporada de su carrera, en la que alcanzó su primera final de Grand Slam en París: "Si el año que viene repito lo mismo y acabo igual de cansado, lo firmo", afirmó el español.