Valencia seguirá contando con el Open de tenis al menos una edición más a pesar de no haberse cerrado aún un acuerdo entre la organización del torneo, la Generalitat y el Ayuntamiento. La falta de tiempo para cambiar de sede y sobre todo el deseo de los propietarios por apurar al máximo las opciones para seguir en el Ágora han hecho que el Open vuelva a disputarse un año más en casa, aunque en esta ocasión lo hará con un presupuesto más reducido para evitar pérdidas y ya como categoría de 250 en lugar de 500.

­Este mismo viernes, de hecho, se ha formalizado el intercambio de los derechos del torneo de Valencia y de Viena por el cual el Open 500 pasará a disputarse en Austria a partir de este mismo año. Un acuerdo que ya estaba pactado pero que no se concretará formalmente por escrito hasta pasado mañana, ya con el visto bueno de todas las partes implicadas.

Eso sí, el cambio de categoría de un torneo y otro no afectará en esta edición a las fechas para evitar problemas con el calendario, de ahí que un año más Valencia volverá a competir con Basilea „torneo de categoría 500„ por tener al mayor numero de mejores jugadores del circuito, en una época en la que muchos de ellos necesitan sumar puntos para entrar en el Masters de final de temporada.

El torneo se disputará así del 26 de octubre al 1 de noviembre de 2015, mientras que en 2016 se cambiará de fechas con Viena, se adelantará una semana y pasará a competir con Moscú y Estocolmo, de su misma categoría.

Al margen de la notable reducción de gastos que supondrá el cambio de categoría 500 a 250, la organización bajará también costes con los premios a los jugadores, ya que pasarán de 2,2 millones de euros aproximadamente al millón de euros para la próxima edición. Unas cifras que si bien difícilmente permitirán acabar con números positivos, sí ayudarán a no acabar con pérdidas como ocurrió en la última edición.

Los contactos entre los organizadores del torneo y los nuevos dirigentes de la Generalitat Valenciana comenzaron hace dos semanas con buenas sensaciones por ambas partes a pesar de las dificultades para mantener las ayudas pactadas con los anteriores responsables políticos y que marcaban una ayuda de 1,5 millones para la próxima edición. Además, el lunes se reunieron también con los responsables del Ayuntamiento de la ciudad para trabajar en la misma línea de garantizar la continuidad del torneo en Valencia en las próximas temporadas una vez reducido ya el presupuesto por el descenso de categoría del torneo después de que en anteriores temporadas superara los siete millones de euros.

De momento, ya hay un principio de acuerdo y la voluntad de todas las partes por una mayor implicación de torneo en las Escuelas Municipales, aunque el Open ya se volcó en ediciones anteriores con la cantera y, con iniciativas como la del Valencia Open 500 Street Tennis, llevaron pistas de mini tenis a distintos lugares de la Comunitat Valenciana para promocionar el deporte entre los aficionados más jóvenes.

El interés de otras ciudades españolas por acoger el torneo queda así aparcado de momento a la espera de ver cómo concluyen las negociaciones entre los organizadores del torneo, el Ayuntamiento y la Generalitat, aunque en ningún caso peligra ya la disputa de la edición de 2015 en Valencia. Una edición en la que, pese al descenso de categoría, el Open espera contar con un cuadro de jugadores similar al de las anteriores ediciones y entre los que estará salvo causa mayor por lesión, David Ferrer, copropietario junto a Ferrero.