La historia de Valencia con el Open de tenis ha llegado a su fin. Una ruptura previsible y anunciada pero no por ello menos dolorosa. Las diferencias irreconciliables entre la organización del torneo y la Generalitat Valenciana han sido la principal causa para que se tome la decisión de no seguir adelante con el Valencia Open. Un Juan Carlos Ferrero afectado y casi entre lágrimas fue el encargado de anunciar el fin del torneo en Valencia. El final de su gran sueño y del de David Ferrer, máximos propietarios del torneo, y quienes a su pesar, han tenido que empezar las negociaciones para la venta de la licencia. Unas negociaciones que se encuentran muy avanzadas y que, a falta de una firma oficial que podría realizarse en los próximos días, llevarían el Open hasta Bélgica. El peor de los finales pero la mejor solución según los propietarios.

Según explicó el propio Ferrero, la Generalitat no ha respetado los acuerdos comerciales que se acordaron, tanto el pasado año como el actual, al no abonarles el millón y medio de euros de la pasada edición, ni los 350.000 euros de la actual, algo por lo que incluso están estudiando la posibilidad de presentar una demanda por ello. "Nos sentimos profundamente decepcionados porque haya sido la última vez que veamos el torneo en Valencia. Más que decepcionados, engañados. Teníamos un acuerdo con el Gobierno que había en 2014 y ahora con el que ha entrado, que no han cumplido", ha indicado Ferrero. «No nos vamos por nosotros, sino por otra gente. Personalmente estoy muy tocado. Es un torneo que compré hace muchísimos años y era una ilusión a futuro. Tener que acabar de esta manera es un palo fuerte para todos», confesó un afectado Ferrero.

Las pérdidas económicas que arrastra el torneo en los últimos años han sido el detonante. Debido a la falta de pago de lo acordado de la Generalitat, el Open perdió casi dos millones de euros en 2014 y en esta edición ronda el millón. La situación es ya insostenible para los propietarios. Con la venta de la licencia se aseguran cubrir las pérdidas de estos años e incluso podrían recuperar algo del dinero invertido. "Hemos hecho un trabajo fantástico durante muchos años para ser uno de los mejores torneos. Pese a bajar este año a la categoría 250 hemos hecho un esfuerzo grande por tener el torneo aquí en Valencia", comentó Ferrero, quien desea que en un futuro, el tenis volviera a Valencia, aunque en otras condiciones. "Ojalá podamos volver en un futuro, pero ojalá no con ellos, la relación ha acabado muy mal" confesaba el exnúmero uno del mundo.

Por su parte, David Serrahima, director técnico del torneo, quiso hacer hincapié en que el acuerdo con la Generalitat no era una subvención, sino un acuerdo comercial. "Ellos compraron una serie de soportes, con cualquier otra marca patrocinadora que no hubiera respetado un acuerdo estaríamos en el Juzgado y es algo que tenemos que estudiar", aseguró. "No se puede tomar esta decisión en caliente como ahora estamos, pero cuando alguien incumple un acuerdo durante dos años te sientes engañado. Si la Generalitat no cumple lo prometido en 2014 y 2015 no hay ninguna opción de seguir hablando del torneo. La decisión está tomada, no hay torneo en Valencia la próxima edición», subrayó. Para finalizar, Serrahima puntualizó que durante los 13 años que el torneo se ha disputado en Valencia, Ferrero ha recibido más de una oferta por llevarlo a otros países, y ha desvelado que «no ha querido ni escucharlas. Es la situación y el incumplimiento lo que nos obliga a irnos".

Bautista se queda sin título

El cansancio acumulado de los partidos anteriores y de toda la temporada fue para Roberto Bautista el motivo de su derrota ante Joao Sousa en la última edición del torneo. Con la final encarrilada en el primer set y ventaja en el segundo, el de Benlloch se fue viniendo abajo hasta dejarse remontar por un portugués que vio la debilidad del valenciano y supo sacar provecho de ella para alzarse con el primer título de la temporada. "Ha sido un tema físico, llevaba el partido bastante bien, pero mi nivel ha bajado, él ha metido intensidad y ritmo y a mí me han faltado piernas para terminar el partido", explicó Bautista que muy afectado confesó que ganar en Valencia era un gran sueño para él y que lamenta profundamente que el torneo termine.