David Ferrer no ha disfrutado ni mucho menos de la mejor temporada de su carrera, pero a pesar de ello, se ve con fuerzas y optimismo suficiente para intentar alargar su retirada más allá de 2018. "¿Será la próxima su última temporada como profesional? "No, espero que no, ojalá que no", manifestó el tenista de 35 años nacido en Xàbia (Alicante), que estuvo en el 'top 10' de la ATP durante siete temporadas y que llegó a ser el tercer mejor tenista del mundo en julio de 2013.

"El objetivo del año que viene es no marcarme un objetivo, ir semana a semana, mejorando y disfrutando. Intentar disfrutar de cada partido que juegue", explicó Ferrer a EFE en una entrevista durante un acto de la marca de automóviles Peugeot, de la que es embajador.

El balance del alicantino sobre la temporada que concluye es "positivo", después de un inicio complicado en el que reconoció que "tocó fondo" en el Másters 1.000 de Miami, tras quedar eliminado en su debut, en la tercera ronda contra el argentino Diego Schwatzman.

"No empezamos todo lo bien que quisiéramos, pero luego sí que es cierto que el verano fue bien, pude ganar un torneo en Bastad (Suecia), jugué las semifinales de un Máster 1000 (Cincinatti)", comentó.

"Obviamente ha sido el peor año de ránking, pero hago un balance positivo. He podido acabar entre los 40 mejores del mundo, tal como empecé, así que de cara al año que viene voy a intentar afrontarlo de manera mas positiva", añadió Ferrer.

Ausente de las Finales ATP por segunda temporada consecutiva, Ferrer valoró el triunfo del búlgaro Grigor Dimitrov, el primer debutante que llega a la final de este torneo desde él mismo, que lo logró en 2007.

"Es un jugador con mucho talento que ha explotado este año y, encima, buena gente. También (David) Goffin. Es bueno que la gente pueda ver diferentes jugadores", apuntó.

El tenista español valoró como un aspecto positivo que vaya tomando la alternativa una nueva generación, con tenistas como Dimitrov, el alemán Alexander Zverev (20), el austríaco Dominic Thiem (24) o el español Pablo Carreño (26).

"Es bueno que haya una generación nueva, durante muchos años han estado los mismos. Este año ha sido la vez que más se ha visto un cambio generacional: Goffin, Thiem, Carreño... Sin embargo, Roger Federer y Rafa Nadal han seguido manteniéndose, y eso está al alcance de muy pocos, mantenerse ahí durante tantos años", dijo.

Sobre su compatriota Nadal, actual número uno mundial, señaló que su temporada ha sido "muy buena".

"Número uno, ha ganado dos Grand Slam (Roland Garros y el Abierto de Estados Unidos), es muy bueno para todos, para el tenis en general, y más aún que sea español", señaló Ferrer.