El Valencia Basket está muy atento a todo lo que sucede con Rodrigo San Miguel tras la lesión del pasado martes en el choque ante el VEF Riga. Y es que aunque las dos fracturas vertebrales en el cuello son limpias y no han afectado a la medula, al cierre de esta edición el jugador todavía permanecía ingresado en la Clínica Quirón donde estaba previsto que pasara su segunda noche a la espera de un diagnóstico definitivo sobre los plazos de su recuperación. Plazos que van a ser superiores a los dos meses y que van a obligar, con casi toda seguridad, al club taronja a acudir al mercado para buscarle un sustituto durante su ausencia.
Un recambio que deberá ser cupo de formación „con todas las limitaciones que ello conlleva a estas alturas de la temporada„. Desde el club, como suele ser habitual en este tipo de situaciones, ya se ha movido ficha aunque esta vez en una dirección muy clara a falta únicamente del OK definitivo de Velimir Perasovic.
Y es que el valenciano y ex taronja José Simeón, actualmente en las filas del Força Lleida de Adecco Oro, no sólo es la opción que más gusta ahora mismo sino también la más viable dentro de un mercado limitado en el que no existen demasiadas alternativas de garantías. Carlos Cherry, que milita en el UJAP Quimper francés o Nacho Ordín, también en Francia defendiendo los colores del Pau Orthez, podrían ser otras opciones pero no tan claras como la del canterano taronja, cuyo regreso sería visto también con muy buenos ojos por todo el entorno del club. De hecho la operación está ya muy avanzada y, salvo un giro inesperado de los acontecimientos, podría cerrarse incluso hoy mismo.
Mientras esto sucede, habrá que seguir muy de cerca también la evolución de un San Miguel que en las últimas horas ha recibido numerosas muestras de cariño de todo el baloncesto español. Algo que, aunque no servirá para acelerar su recuperación, sí que al menos le ha reconfortado en unos momentos más que complicados tanto para él como para su familia.
Dubljevic mejora de su fractura
Bojan Dubljevic sufre una fractura nasal con desplazamiento que fue reducida ayer en el Hospital 9 d´Octubre y que no le impedirán entrenar con normalidad y jugar el sábado con una máscara especial.
