Velimir Perasovic ya se ha hecho a la idea de no poder contar con Gelabale en la Copa del Rey ni aún en el caso de que no renueve su contrato con los Timberwolves hasta final de temporada. Los cálculos iniciales del club respecto a su posible regreso de la NBA no se van a poder cumplir por el retraso a la hora de firmar cada uno de sus contratos de diez días con la franquicia de Minnesota.

El jugador se fue a Estados Unidos el 13 de enero y de haber firmado al día siguiente el contrato previsto de diez días más otros diezprorrogables, habría acabo su vinculación con los Timberwolves el 2 de febrero, con tiempo suficiente para regresar a Valencia e inscribirse para jugar la Copa del Rey, como querían los responsables de la entidad taronja. Sin embargo, el pequeño retraso a la hora de firmar su primer contrato unido a que el segundo se cerró el pasado 29 de enero, hacen que esté atado a la franquicia de la NBA al menos hasta el 8 de febrero, justo el día en el que el Valencia Basket tiene que jugar su primer partido de Copa ante el Asefa Estudiantes.

El hecho de que en la Copa del Rey haya dos plazos distintos de inscripción hace que aún tuviera una mínima opción de jugar la hipotética final si Minnesota le comunica el viernes 8 que no renueva hasta final de temporada, ya que los equipos clasificados para la semifinal podrían inscribir jugadores hasta el mismo sábado día 9 a las 14:00 „el plazo para inscribir jugadores para el primer encuentro de los equipos que juegan el viernes, finaliza el jueves a las 20:00„. Aún en este caso, sus opciones de jugar la semifinal o sobre todo la final, serían prácticamente nulas teniendo en cuenta que Gelabale tiene la posibilidad contractual de prolongar durante 48 horas más su estancia en Estados Unidos para apurar sus opciones de fichar por cualquier otra franquicia o incluso para que Minnesota tenga más tiempo para tomar una decisión respecto a su futuro.

Si el jugador decide hacer uso de esta cláusula no habría ya ninguna opción de que llegara a tiempo para jugar una hipotética final, pero a pesar de ello, el club taronja sigue contando con él para lo que resta de temporada, convencidos de que sus opciones de seguir en Minnesota pasan porque la franquicia dé la baja a algún otro jugador al tener ya quince fichas cubiertas, algo que a priori parece poco probable.

Sólo en el caso de que los Timberwolves opten por este camino, el Valencia Basket activaría el plan B con algunos de los jugadores que están siguiendo para cubrir su posible adiós definitivo del club.