Buena puesta en escena del Valencia Basket en Miribilla, que saltó a la pista con las ideas mucho más claras que su rival. Con Pau Ribas en el cinco inicial, algo muy poco habitual pese a su ascendencia en el equipo, los taronja se adueñaron del ritmo del choque desde el inicio. La presencia del escolta catalán en la cancha así como el buen rendimiento de Lishchuk en los primeros compases sorprendió a Sito Alonso, que en toda la primera mitad no encontró la fórmula para frenar a un Valencia Basket muy superior. Intenso en defensa, concentrado y sin apenas lagunas pese a los problemas para defender el pick&roll del Dominion Bilbao Basket, el conjunto dirigido por Carles Duran fue abriendo poco a poco brecha en el luminoso (14-21; min. 9). Una renta escasa, eso sí, para lo que se estaba viendo en la pista, donde por entonces la valoración de ambos equipos reflejó mucho mejor lo que estaba sucediendo (12-25).

El Blbao tiró de orgullo en el segundo acto para, tras un parcial de 0-6, estrechar las diferencias (22-24; min. 13). El cuadro vasco encontró un filón en Latavious Williams, que desde la pintura compensó las carencias de su equipo en un perímetro que no terminaba de funcionar. Carles Duran, de inmediato, paró el partido de manera providencial para corregir situaciones puntuales y cortar la inercia bilbaína. El Valencia Basket, de la mano de Van Rossom y con el rebote otra vez controlado, recuperó la compostura para romper ese parcial y ampliar la renta en el marcador (24-34; min.16). Los locales acusaban por momentos la exigencia física no sólo del choque, sino también de la serie, y pese que continuaron haciendo la goma gracias a la inspiración exterior de hombres como Raúl López o Bertans (33-36; min. 18), en ningún momento fueron capaces de equilibrar la intensidad y ritmo de los taronja. Un parcial de 0-9 antes del descanso constató esas sensaciones al tiempo que permitió al equipo de Duran marcharse a los vestuarios con su máxima ventaja (33-45; min. 20).

Pero al igual que sucedió el pasado sábado en La Fonteta, el Bilbao Basket se metió en el partido en el tercer cuarto. Y además en tiempo récord, tras un parcial de 9-2 liderado por Mumbrú y Quino Colom (42-47; min. 23). Otra vez Duran tuvo que pedir tiempo muerto para intentar sacar a su equipo del colapso ofensivo por un lado, y de la permisividad defensiva por el otro. Lo logró en parte, aunque las renta eran cada vez más estrechas debido también a los problemas para controlar el rebote defensivo (51-53; min. 28). Los taronja, pese a la presión y el empuje local, aguantaron el tipo a duras penas para encarar el último cuarto todavía con ventaja ( 53-57; min. 30).

Ventaja ampliada en el primer minuto del último acto con dos acciones consecutivas de Lucic y Dubljevic (53-62; min. 31). Esos nueve puntos de renta, viendo como estaba el partido, parecía que podían ser definitivos hasta el final, pero nada más lejos de la realidad. A partir de ahí, Raúl López se hizo con la batuta del choque para, tras un parcial de 11-2, empatar el encuentro a falta de cuatro minutos del final (64-64; min. 36). Un marcador que no se veía desde el salto inicial y que culminó Mumbrú con un tiro libre a falta de 1:17 del final (67-66; min. 38). Era la primera vez que los locales se ponían por delante en el marcador y los presagios es evidente que no eran los mejores. Sin embargo, ahí emergió nuevamente la figura de Pau Ribas para primero con un triple providencial y luego con dos tiros libres arreglar el 2+1 con el que antes Mumbrú había complicado todo a falta de 42 segundos (70-69; min. 39). Por cuarta vez en su historia, el Valencia Basket alcanza las semifinales de la Liga Endesa.

- Ficha técnica:

70 - Dominion Bilbao Basket (16+17+20+17): Colom (8), Bertans (11), Mumbrú (16), Hervelle y Marko Todorovic (10) -cinco titular-; Raúl López (8), Dejan Todorovic (3), Williams (14), Andusic y Wragge.

71 - Valencia Basket (21+24+12+14): Van Rossom (14), Ribas (11), Sato (2), Aguilar (7) y Lishchuk (4) -cinco inicial-; Vives, Rafa Martínez (3), Lucic (2), Harangody (7), Dubljevic (13) y Loncar (8).

Árbitros: Martín Bertrán, Jiménez y Cortes. Eliminado Van Rossom (m.40).

Incidencias: tercer y definitivo partido de cuartos de final de las eliminatorias por el título de la Liga Endesa, disputado en el Bilbao Arena de Miribilla ante 8.217 espectadores, según la estadística oficial del partido.