La brillante temporada que venía realizando el Valencia Basket ha quedado muy ‘tocada’ después de los resultados de este último mes y, sobre todo, de unos últimos ocho días para olvidar. Ocho días de penitencia en los que el equipo se ha quedado fuera de la Eurocup y de la Copa del Rey mucho antes de lo previsto. Lo más complicado, sin embargo, llega en este momento a la hora de pasar página y seguir firmes en la pelea en la Liga Endesa.
Y es que eran muchas las ilusiones y esperanzas depositadas en ambas competiciones, en las que los valencianos partían con grandes opciones de alzarse con el título. Sin embargo, la realidad ha sido muy distinta ya que no sólo ha dejado al equipo en el camino, sino que lo ha hecho mucho antes de lo previsto. En ambos torneos y con apenas una semana de margen. Un golpe muy difícil de asimilar por un club y un grupo que, hace apenas unas semanas, maravillaba al mundo entero con su espectacular racha de victorias consecutivas (28).
Mérito que no hay que pasar por alto ahora que el equipo vive sus horas más bajas, pero que tampoco debe ocultar el hecho de que ese mismo equipo no ha sido capaz de cumplir con los objetivos mínimos del club en la Eurocup y en la Copa del Rey. Por presupuesto, plantilla y potencial el Valencia Basket nunca debió caer eliminado de esta manera en ambos torneos, y eso es algo que todos en la entidad taronja tienen muy presente.
Es más, la preocupación todavía es mayor analizando los resultados del último mes, en los que los de La Fonteta sólo han sido capaces de ganar cuatro de los nueve últimos encuentros oficiales disputados. A partir de ahí, la consecuencia directa ha llevado a quedarse fuera de la lucha por el título en dos competiciones. Algo en lo que, es evidente, también han influido los problemas físicos de algunos jugadores y el regreso de otros...aunque a un nivel por debajo del que estaban rindiendo.
Todo suma y todo afecta en una temporada extraña, de demasiados contrastes por esa espectacular trayectoria liguera y en la que resulta realmente complicado calibrar cual es la realidad del equipo y hacia donde va encaminado lo que resta de temporada. No obstante, y más allá de esa lógica incertidumbre, lo único cierto a día de hoy es que la plantilla ya se encuentra en Valencia mientras otros cuatro equipos siguen en A Coruña peleando por la Copa de Rey.
Algo a lo que toda la expedición seguía dándole vueltas durante el triste regreso a casa. Rostros muy serios y gestos contrariados presidieron la expedición taronja, que aterrizó en Valencia antes del mediodía. Tal vez por ello Pedro Martínez prefirió darles libre hasta el lunes y preparar en las mejores condiciones el choque de la fase regular ante el Real Madrid.
