Al margen de la derrota ante el Movistar Estudiantes, Romain Sato protagonizó la otra noticia negativa en el encuentro. A falta de dos minutos para el final un casi triple del alero centroafricano —estaba pisando— colocaba al Valencia Basket a un punto (61-62). Dos puntos que costaron muy caros ya que, por un lado nosirvieron para ganar y, por otro, en esta misma jugada su defensor acabó pisándole en el pie izquierdo. Una acción que resultaría fatal pues Sato se produjo un esguince en el tobillo y ya no pudo volver al encuentro.

"Ha sido muy duro y doloroso porque al chafarme me he girado el tobillo. No sé si estaré para poder jugar el próximo fin de semana. Aún es pronto, habrá que valorarlo mañana —por este lunes—", confesó a Superdeporte mientras abandonaba cojeando el pabellón.

Más optimista en sala de prensa se mostró su entrenador, Pedro Martínez, aunque ni mucho menos estaba convencido de poder contar con el alero en los próximos días. "No parece que sea muy grave pero vete tú a saber. Veremos en los próximos días", dijo el preparador catalán.