El Valencia Basket olvidó en Las Palmas a John Bryant y el partido ante el Real Madrid con un trabajado triunfo ante el Herbalife Gran Canaria. No fue un partido brillante, pero si muy serio por parte de los taronja, que supieron golpear en los momentos precisos para llegar a los últimos minutos con una importante renta.

Empezó muy bien el Valencia Basket en el encuentro. Muy serio en su juego y haciendo gala de una gran solidez defensiva, los locales se estrellaron con un muro infranqueable en los primeros minutos. Además, los taronja castigaban con relativa facilidad cada error del Gran Canaria, lo que le llevó a marcharse rápidamente en el luminoso (2-12; min. 4). Llegaron las primeras rotaciones pero el equipo de Pedro Martínez apenas lo acusó, abriendo un poco más la brecha entre ambos conjuntos (9-20; min. 7). Las pérdidas comenzaban a pesar como una losa en el bando isleño y a Luis Casimiro no le quedó otra que parar el choque en busca de soluciones.

Y las encontró justo en el momento en el que Joan Sastre hacía su debut en la Liga Endesa esta temporada. El Gran Canaria puso una marcha más, subió su intensidad defensiva y Paseckniks se adueño de la pintura ante la desesperación de Dubljevic. Los de La Fonteta, ahora más nerviosos, empezaron a perder balones y perder frescura ofensiva. El parcial de 15-4 no dejaba lugar a la duda acerca de lo que estaba sucediendo en la pista (24-24; in. 14). Afortunadamente, Sato ejerció de 'despertador' para aportar algo de oxígeno en esos momentos (26-33; min. 16).

Parecía que el Valencia Basket controlaba de nuevo el juego, pero nada más lejos de la realidad. La clave volvía a estar en el juego interior, donde ahora Planinic ejerció de referente para darle la vuelta al partido a 30 segundos del descanso (36-35; min. 19). Apenas quedaba tiempo pero Diot asumió con acierto la responsabilidad en esos instantes finales para poner a los valencianos por delante antes de marcharse a los vestuarios (36-37; min. 20).

Tras la reanudación, un parcial de 4-0 puso la máxima ventaja para el Herbalife Gran Canaria (40-37; min. 21). Momento importante resuelto con una fase de intercambio de canastas en la que, una vez más, se hicieron patentes los nervios de los dos equipos (42-41; min. 22). Fue el momento de Diot, San Emeterio y Sikma, que no sólo mantuvieron a los taronja en el choque, sino que les dieron un plus junto a Dubljevic para volver a abrir hueco en el marcador (47-55; min. 26). Sus fuerzas, sin embargo, no aguantaron mucho más y eso lo aprovecharon los locales para seguir vivos en el partido antes del último acto (57-61; min. 30).

Los minutos siguientes no fueron nada diferente al resto del partido, que seguía moviéndose en un puño. Sin embargo, dos buenas defensas llevaron a Sikma y Sastre a disparar de nuevo a los suyos en el partido (63-73; min. 34). Casimiro paró el choque para cortar la inercia y buscar una remontada cada vez más difícil con ataques rápidos. Pero ni a uno ni a otro equipo le salió nada. La sucesión de errores fue constante en las acciones posteriores, con un Valencia Basket que tuvo ahí incontables oportunidades para sentenciar el partido. No lo hizo pero, al menos, sí supo mantener a su rival a raya hasta el final. Destacar ahí el trabajo oscuro pero muy importante de Pierre Oriola, que dejó su lugar a Dubljevic a tres minutos del final eliminado por falta pero con el triunfo prácticamente ya en el bolsillo.