Un éxito. Así debe considerar el Valencia Basket haber alcanzado una nueva final y poder luchar por otro título. Ahora bien, a este club no le basta con eso. La ambición es máxima y, una vez llegados a este punto, la siguiente parada es hacer historia. Así es. El Valencia Basket, por su 30 aniversario, ha venido a Vitoria dispuesto a regalarse una Copa del Rey. Y hasta ahora todo marcha sobre ruedas. Sólo falta un paso más, un último obstáculo en forma de un ´coco´ llamado Real Madrid.

El actual campeón de la Liga Endesa ha ganado las tres últimas ediciones y, sobre el papel, es de nuevo el gran favorito. Por tanto, presión cero para el equipo de Pedro Martínez, al que el hambre, las ganas y la ilusión por hacer algo grande debe servirle de estímulo en esta final.Pedro Martínez, La quinta que disputa el club valenciano en el torneo del KO tras las de 1998, 2000, 2006 y 2013. El balance, eso sí, es de un sólo título. el logrado en el estreno y por sorpresa en Valladolid -allí el Valencia Basket de Miki Vukovic llegó como octavo clasificado-. Desde aquella gran alegría, tres finales más y tres derrotas que dejaron un sabor muy amargo en el club.

La Copa le debe ya otra fecha para recordar al Valencia Basket, y más en un año tan especial. La Cultura del Esfuerzo busca esta tarde su gran recompensa, y lo hace sin complejos ante un rival con el que sabe que puede competir de tú a tú.

No en vano el Real Madrid llega a la final con mucho sufrimiento y alguna ayuda arbitral ante el MoraBanc Andorra que el Buesa Arena se encarga de recordar a la mínima ocasión. Ese partido lo salvaron en la prórroga, al igual que las semifinales ante el Baskonia.

Llevarles a esa situación límite es el objetivo de los taronja, que llegan a la final en un gran momento de forma, pisando sobre suelo más firme y sin apenas fisuras en su juego. Y otra cosa, esta tarde jugarán en casa. El Buesa Arena se vestirá de La Fonteta con siete aficiones apoyando al Valencia Basket en la pista.