Avanzan los días y el Valencia Basket va priorizando sus objetivos en el mercado. Con las NBA Summer League de Orlando y Utah ya en marcha, y a cuatro días vista de que arranque la cita de Las Vegas, no se esperan novedades importantes antes de que el próximo 17 de julio concluya en Nevada este último evento. Son varios los jugadores interesantes que los taronja están siguiendo y que no decidirán su futuro hasta tener claro sus opciones de encontrar acomodo en la liga estadounidense.

No es el caso, por ejemplo, de Micheal Eric. El pívot senegalés, una de las opciones que más gustan para reforzar el puesto de ‘cinco’ en el conjunto taronja, promedió el pasado verano en Las Vegas 9,5 puntos, 5 rebotes y 1,8 tapones antes de comprometerse con el Bilbao Basket. Estos días, sin embargo, no competirá en ninguna de las Summer League una vez decidido que su carrera deportiva va a continuar en el viejo continente.

En Europa presenta una trayectoria ascendente tras militar en el Panelefsiniakos griego, en el Brindisi italiano la temporada 2014/15, en el AEK Atenas en la 2015/16, y en el Bilbao Basket el pasado curso. Formado en la Universidad de Temple, de ahí pasó a la Liga de Desarrollo para disputar 98 encuentros entre los Canton Charge y Texas Legends. Llegó incluso a ser elegido para participar en el All-Star de 2016. Ha sido esta última campaña, sin embargo, cuando su juego ha experimentado un importante salto de calidad bajo la tutela de Carles Duran.

Eric, de 29 años y 2,10 metros, ha sido uno de los grandes referentes del conjunto vasco. Así, en la Liga Endesa ha promediado 9,5 puntos, 5,6 rebotes y 10,6 de valoración en 30 partidos, mientras que en la Eurocup sus números se fueron hasta los 10,6 puntos, 4,8 rebotes y 12 de valoración en los ocho encuentros disputados. Una alta productividad pese a disputar apenas veinte minutos de media por choque.

Tanto el nuevo entrenador, Txus Vidorreta, como Chechu Mulero, director deportivo, consideran que es un jugador que puede encajar perfectamente en el proyecto compartiendo protagonismo con Bojan Dubljevic y Pierre Oriola, cuyas características son muy distintas. Y es que Eric es un pívot contundente, con recursos para jugar de espaldas al aro, decidido en el uno contra uno y buenos movimientos cerca del aro. Perfil que el equipo taronja necesita para competir en Euroliga. El principal problema, en su caso, es que el Bilbao tiene una opción para renovar su contrato por una temporada más. Opción que todavía no ha sido ejecutada.