Con cuatro bajas seguras y la duda de Erick Green hasta última hora, Txus Vidorreta espera que el resto de jugadores sigan dando lo máximo de sí mismos para hacer olvidar en la medida de lo posible las ausencias. Sabe que tocará sufrir y avisa ya de que hay que estar peperado para ello.

«Jugamos contra un equipo muy físico, tienen jugadores muy físicos en posiciones de uno, dos y tres. Que es justo donde nosotros, con las ausencias, vamos un poco más justos. Los dos equipos vamos a llegar con una carga muy importante porque ellos no tienen tampoco una rotación muy larga. Va a ser un partido en el que tenemos que entrar fuerte mental y físicamente. Y asumir que ellos son un equipo agresivo y jugar con contacto».

El técnico taronja, de hecho, no olvida las dificultades que tuvieron ante los de Jasikevicius en el partido de hace un mes en la Fonteta. «En el partido que jugamos aquí tuvimos momentos en los que supimos jugarles muy bien, luego otros en los que no. Debemos extraer conclusiones de esos momentos en los que no supimos jugarles tan bien para tener nuestra opción para ganar, porque en baloncesto hay que aprovechar las rachas buenas para alargarlas. A ver si somos buenos en alargar las rachas buenas, ya que no lo fuimos en cortar las malas».

Respecto a la presencia de Erick Green en el partido, Vidorreta mantendrá la última hasta última hora, aunque era optimista de cara a poder darle algunos minutos si fuera necesario. «Con Erick vamos a hacer un trabajo progresivo, pero quiero ser optimista de cara a que pueda estar con el equipo. Otra cosa es que vaya a disponer de muchos minutos». Y es que no quiere arriesgar pese a contar solo con Van Rossom en la posición de base.