Joaquín Sánchez consiguió en La Rosaleda el pasado sábado lo que David Villa no pudo conseguir nunca como jugador valencianista en las cinco temporadas en la que estuvo en el club: empezar la Liga con un doblete. El gaditano, pese a no ser ni delantero ni un goleador nato, con los dos tantos anotados ante el conjunto malaguista, inicia de forma inmejorable el curso y le añade algo de morbo a la herencia del dorsal que dejó el Guaje en el club, el '7', y que ahora ha ido a parar a su espalda.

Ayer, en una de las paredes de la ciudad deportiva, se podía leer en uno de los múltiples mensajes que dejan allí de forma improvisada los aficionados, el texto que captó el objetivo de SUPER: 'El 'pisha' moreno el mejor '7' después de Villa'. Y es que el número que durante temporadas se asoció al ariete asturiano en el Valencia tiene ahora un peso especial aunque no cabe dudad de que Joaquín, por lo visto hasta el momento tanto n la pretemporada como en el estreno liguero, tiene fuerza de sobra para llevarlo.

Villa hizo su debut como valencianista en Liga el 27 de agosto de 2005, en Mestalla, jugando los últimos cinco minutos de un partido ante el Betis —donde por aquel entonces militaba curiosamente Joaquín— en el que entró en la recta final sustituyendo a Aimar y en el que se quedó sin marcar pese a que el VCF ganó 1-0. La historia al año siguiente fue similar puesto que el VCF se midió en el estreno liguero al mismo rival —Joaquín no jugó aquel partido por estar a punto de fichar por el VCF— y el Guaje, otra vez más, se fue sin marcar en un partido que acabó 2-1 también en Mestalla. En su tercer arranque liguero, en la campaña 2007/2008, el Valencia perdió 0-3 ante el Villarreal y tanto el asturiano como Joaquín fueron expulsados... y fue al cuarto año cuando Villa sí marcó en su debut pero sólo un gol en un choque que acabó 3-0 para los de Unai ante el Mallorca. Por último, la pasada campaña, el VCF ganó en su estreno liguero al Sevilla 2-0 pero Villa se quedó sin marcar.

Tras la estela de Mijatovic

Joaquín, además, se ganó en La Rosaleda el honor de ser el último jugador valencianista que inicia la competición doméstica con doblete por última ocasión hasta el sábado en la primera jornada, algo que había conseguido Mijatovic por última vez en los cursos 93/94 y 94/95 en el Tartiere (allí marcó los dos goles en un triunfo por 0-2) y el Calderón (el equipo ganó 2-4 y el montenegrino metió tres tantos) ante Oviedo y Atlético de Madrid, respectivamente.

Y es que Joaquín, a mediados de la semana pasada, bromeaba ya en sala de prensa de la ciudad deportiva cuando afirmaba que se conformaba con meter «la mitad de goles» que el Guaje con la camiseta y su nuevo dorsal... aunque de momento, tras la primera jornada y aunque no deje de ser anecdótico, el gaditano lleva el doble de goles que el asturiano que sumó uno en su debut en Liga como culé. De momento, es lo que hay.