El Valencia tuvo que luchar con un contratiempo que no esperaba y no precisamente la actuación arbitral de Ramírez Domínguez: los cortes de digestión. Eso es lo que le le pasó a dos de sus futbolistas antes y durante el partido: Juan Mata y César Sánchez. El asturiano y el de Coria, dos de los mejores del equipo en el Rico Pérez, tuvieron problemas sobre el terreno de juego.

El primero que los sufrió fue Mata. El internacional blanquinegro lo pasó mal antes del encuentro, pero poco a poco se fue recuperando. Tanto que acabó por marcar un tanto en el primer minuto y participar en la jugada del gol de Pablo Hernández. El asturiano fue cambiado por Unai en el minuto 53 para dar entrada a Dealbert.

Peor aún lo pasó César. El de Coria sufrió mareos en la mitad de la primera parte hasta el punto que el cuerpo técnico mandó a calentar a Moyà en la banda. Afortunadamente, el portero blanquinegro se recuperó a tiempo y fue el jugador del Valencia más destacado en una segunda mitad de infarto. Los cortes de digestión, el calor, lo mareos y el cansancio provocó que muchos futbolistas se sentarán en el suelo al llegar al vestuario a la media parte. Y es que los asientos del vestuario se quedaron vacíos. Lo malo es que lo peor aún estaba por llegar después de la injusta expulsión a David Navarro.