Dos águilas peruanas montan guardia sobre el césped de Mestalla. El Valencia ha dado un giro importante en su política de mantenimiento del césped del estadio, cambiando a la empresa que desde hacía 14 años realizaba el trabajo sobre el campo y con los nuevos responsables quiere recuperar el terreno de juego, seriamente afectado en las últimas semanas. El objetivo es que esté en condiciones para el partido de Liga de Campeones ante el Bursaspor del próximo 24 de noviembre.
El primer paso, tras realizar una serie de pruebas en el área técnica, ha sido el resembrado otra vez del césped, una vez descartada la posibilidad de cambiar por completo el césped. Para evitar que las palomas se coman las semillas, desde ayer se instalaron en Mestalla dos águilas peruanas, que de forma amenazante vigilan desde el terreno de juego cualquier posibilidad de que se acerquen cualquier otra ave. Un macho y una hembra —pronto serán tres águilas— que se encargarán de limpiar Mestalla de aves. De hecho, la idea del VCF, una vez acabado el periodo de sembrado, es mantener una de las águilas o otra ave rapaz de similares características, que además de evitar que existan nidos en Mestalla, como mascota. Una mascota a la que los aficionados serán los encargados de bautizar.
´El Nou´ y ´La Pantoja´ —llamada así porque mueve bien la cola— son desde ayer los guardianes de Mestalla, y estarán una larga temporada en el campo, dependiendo de los resultados será mayor o menor el plazo hasta conseguir el objetivo de limpiar el estadio de aves. En la jornada de ayer se las pudo ver en el terreno de juego atadas, pero en los próximos días serán soltadas, para que bajo la atención de su cetrero —criador de halcones y aves de caza— puedan peinar todo el estadio y así evitar que las palomas se instalen de las zonas donde no llegan las águilas en sus vuelos rasantes mientras están atadas. Se trata de dos águilas peruanas, más pequeñas que las americanas, que se han preferido a los halcones ya que que estos vuelan más alto y a gran velocidad y podía crear problemas en los alrededores.
El mal estado del terreno de juego en las últimas semanas, han llevado al club a tomar medidas. A pesar de que esta época del año no es la mejor para resembrar el césped, los nuevos responsables del campo están haciendo un trabajo a contrarreloj para conseguir los mejores resultados en el menor plazo posible, ya que el equipo se resiente del mal estado del césped. Se ha sembrado una variedad especial, se trabaja por la noche —se cubre el terreno de juego con mantas térmicas por las bajas temperaturas de la noche— y se utilizan productos especiales para fomentar el crecimiento. Además, se ha bajado el nivel del césped —siempre dentro de las medidas obligatorias— para que el balón vaya más rápido.
En los últimas horas, se ha trabajando —hay entre 8 y 9 operarios— con rapidez para nivelar el césped de cara al duelo de Copa del Rey de hoy, aunque todavía no tiene el color ni la densidad de planta necesaria para tener un campo de primer nivel, objetivo que se ha marcado el Valencia, que tiene en mente un proyecto ambicioso para que el estadio de Mestalla sea uno de los mejores de Europa.
