Ribarroja y Mestalla empataron en un encuentro trepidante que al final pudo decantarse a favor del filial. No obstante, los de José Arastey jugaron al 200% y se hicieron acreedores de un punto que sin lugar a dudas vale su peso en oro.

Los rojillos, más motivados que nunca, salieron a por la victoria y gozaron de las primeras oportunidades. Tavernet disparó raso y Saúl hizo una buena parada. El filial no se encontraba cómodo. A los 25 minutos unas manos dentro del área blanqujnegrea supuso el penalti que dio origen al 0-1. Álex Cortell firmó el tanto en la que era su reaparición tras unos partidos fuera de combate. Poco duró la alegría, dado que Borja Granero marcó a placer y subsanó su error de la jugada que había dado origen al tanto local.

Mejoró el filial en la segunda mitad, con un dominio que no se tradujo en ocasiones. La más clara la tuvo Isco, que se plantó ante Jordi y su disparo lo despejó el portero. Saúl también se lució en una acción a balón parado servida por Fran Espinosa.

El empate se antoja como un resultado justo y mantiene al Mestalla invicto. Eso sí, los pupilos dirigidos por Vicente Mir han truncado la racha de nueve partidos consecutivos ganados.