Nada más finalizar la sesión de entrenamiento del sábado, Unai le dijo a Isco que quería hablar con él después de que pasara por la ducha. El centrocampista, una vez comprobó que su nombre no figuraba en la lista de 19 convocados, esperó en el túnel de vestuarios pacientemente hasta que el técnico lo reclamó. No fue una conversación muy larga, pero hubo tiempo suficiente para que Emery le comentara cómo le ve a título individual en los últimos entrenamientos. ¿La realidad? Cruel con el mediapunta malagueño, llamado a filas para la primera plantilla cuando se tomó la decisión de no contar más con el Chori Domínguez —salvo necesidad de urgencia— aunque Jonas se está llevado en estos momentos el mérito de ser el «mejor» mediapunta que tiene actualmente el Valencia. Isco no tiene a día de hoy mucho sitio en el primer equipo, aunque eso no significa que esté aprendiendo de cara al futuro, pero Unai no quiere que baje los brazos y le pide que continúe trabajando duro. Además, de momento no se contempla que regrese de nuevo a la disciplina del Mestalla.

Jonas está rindiendo a un gran nivel por detrás del delantero y Unai ha encontrado así al enganche ideal, compenetrándose muy bien tanto con Aduriz como con Soldado, y la prueba más evidente fue el preciso pase entre lineas que supuso el 1-2 en Getafe. Isco ocupó uno de los asientos del banquillo, y con el primer equipo no tiene minutos desde el 2 de marzo, cuando salió al terreno de juego a falta de cinco minutos para el final contra el Barça. Su último partido oficial lo disputó con el Mestalla, el 26 de marzo contra el Borriol, duelo que perdieron por 2-1. Pocos minutos para un futbolista llamado a escribir páginas gloriosas para el Valencia, pero la realidad también dicta que no es fácil tener un hueco en la primera plantilla, más cuando hay futbolistas que están respondiendo bien. A pesar de que el brasileño no parecía destinado a ocupar la posición de mediapunta, sus características le han llevado a dar un gran rendimiento en esa posición. Se ha adaptado perfectamente y de ahí que Unai mantenga en un segundo plano a Isco.

No hay que obviar que el mediapunta cumple el 21 de este mes 19 años, y es muy importante gestionar su progresión. La Dirección Deportiva quiere que todos los pasos que dé el futbolista sean sólidos, dentro de una linea de calma y sin darle una carga de responsabilidad que no le compete, pero Emery no quiere que juegue poco y caiga en el desánimo. Isco sabe que cada sesión de entrenamiento es un premio para él, por eso va a trabajar con el objetivo de aprender de cada detalle, y cuando juegue considerarlo un premio. A día de hoy, Jonas está por delante.