El mundo no se acaba por el ´no´ de Kevin Gameiro. El Valencia, es más, ya había contemplado esa posibilidad y empezará a ejecutar su ´plan B´ mañana mismo. Descartada la llegada del internacional galo, por cuyo fichaje habían apostado pese al notable rendimiento ofensivo del equipo en el pasado curso, Llorente y Braulio Vázquez centrarán todos sus esfuerzos en conseguir un central zurdo y un lateral derecho de máximo nivel. Parte del dinero que guardaban para el todavía jugador del Lorient, si no todo, irá ahora a parar a la contratación de los dos defensas que pide Unai Emery, con los que debería quedar prácticamente cerrado el capítulo de altas para la 2011/12.

Lo dice el refranero español: ´no hay mal que por bien no venga´. El conjunto de Mestalla, gracias a la espantada de última hora del punta francés, dispondrá de mayor margen económico en la búsqueda del ´2´ y el acompañante de Rami. Los cerca de 10 millones de euros ahorrados en el fallido traspaso de Gameiro amplían el abánico con el que se trabajaba hasta el viernes, cuando la premisa era encontrar ese par de refuerzos casi a coste cero.

Hay nombres, como el de Andreas Beck, del Hoffenheim, que vuelven a cobrar fuerza. El alemán era el primero en la lista de objetivos blanquinegros para el lateral diestro, pero la aparición de la Juve en escena, y su coste, unos cuatro millones de euros, habían dejado aparcado su posible fichaje. También en stand-by se encontraba hace unos días la posible llegada del mallorquinista Ramis, de coste similar y una de las alternativas para el central izquierdo.

Quien seguro que formará parte de la zaga valencianista es Adil Rami. Su llegada, más las de Diego Alves y Parejo, cuya incorporación definitiva está a punto de caramelo desde hace días, son un punto a favor del proyecto venidero. Ellos tres aseguran un bloque «más competitivo» de cara, como han prometido Llorente, Braulio y el propio Emery en sus últimas declaraciones.

La ambiciosa apuesta de los dirigentes del club de Mestalla no solo se basa en el potencial de las caras nuevas. La continuidad de los grandes valores de la 10/11 son igua de importantes. Porque, por mucho que haya dolido el ´transfuguismo´ de Gameiro, no hay que olvidar que el Valencia cuenta en su plantilla con algunos de los jugadores de ataque más cotizados de la Liga BBVA.

La confianza en Soldado, Mata y Aduriz es plena. Y la implicación de éstos también. Así como ayer hacía Mata a EFE, el vasco lo dejó claro en la entrevista publicada el pasado jueves por SUPER: «quiero seguir de blanquinegro», decía. En cuanto a Jonas, vista su aportación en sus primeros meses en el equipo, sin apenas rodaje, los técnicos creen que podría convertirse en una de las sensaciones de la próxima campaña.

El principal afectado por el ´no´ de Gameiro es Isco. Para bien, claro. Si Emery no quería ni oir hablar de una cesión del canterano hasta pasada la pretemporada, cuando viera in situ sus progresos, ahora menos. El mediapunta malacitano se asegura casi al 100% un sitio en la plantilla, sobre todo si la salida de Joaquín se confirma; el técnico cree que puede aportar en la mediapunta o partiendo de cualquiera de los dos bandas.