Paco Real falleció este martes a los 72 años de edad tras una vida dedicada al mundo del fútbol, fundamentalmente al Valencia, club al que llegó en 1970 y desempeñó varias funciones tanto en el área deportiva (entrenador de las categorías inferiores del VCF, técnico del primer equipo en el curso 93/94, director de la Escuela y delegado) como en la social (responsable de Relaciones Externas e Institucionales) hasta octubre de 2004. El 2 de octubre sufrió un infarto cerebral tras sentirse indispuesto en Getafe, donde esa tarde jugó el Valencia un partido de Liga y desde ese instante estuvo luchando contra las secuelas hasta este martes.

Este miércoles, a las 15:30 horas, tendrá lugar la misa en el Tanatorio Municipal de Valencia, en lo que será el último adiós a una persona que figurará con letras de oro en la historia del valencianismo y en el fútbol valenciano. Paco también formó parte de la disciplina del Levante, al jugar en el Portuarios —era su filial a finales de los años cincuenta— que vestía de negro y blanco y jugaba en el campo de Vallejo. Como entrenador, antes de ingresar en la escuela del VCF, entrenó al Alzira, Torrent, Burriana, Catarroja y Acero, además de estar en el Colegio de Entrenadores y formar parte unos años de la Comisión Delegada de la Federación. El fútbol era su pasión y siempre encontraba tiempo para compaginarlo con su trabajo en una sucursal de Bancaja.

A Paco se le conocía como el ´Coronel´ por su carácter, «era una persona muy recta y exigente», recuerda Voro, que lo tuvo como entrenador en el filial. Como técnico era muy exigente y serio y de él se pueden recordar múltiples anécdotas, sobre todo cuando cogió las riendas del primer equipo para sustituir a Hiddink. El día de su presentación en el vestuario abanderó la siguiente frase: «Estáis con el mejor entrenador del mundo». Se ganó 0-1 en su debut, al Sevilla en el Sánchez Pizjuán, y los jugadores le pusieron la alfombra roja al volver al hotel de concentración. Unas semanas después el Valencia recibía al Barça y famosa fue la comparación que hizo de Koeman con un armario, el holandés marcó ese partido y la prensa de Madrid se mofó de él al escenificarle como un ´Pavo´ Real. Él se lo tomó con humor, como hacía a la hora de dar las alineaciones a los periodistas, empezando por el delantero para despistar… Igual como fue el primer entrenador en el fútbol valenciano en utilizar la palabra «rombo» a la hora de valorar sistemas tácticos.

Sin duda fue una persona entrañable, que se hacía querer, al margen de entender mucho de fútbol. Uno de los vocablos clásicos en él era «primavera» cuando hablaba con una persona, igual como mágicas e inolvidables serán las charlas que mantenía en las reuniones con la UEFA en las que no hablaba ni inglés ni francés. «Se entendía con todos hablando valenciano», recuerdan Jaume Ortí, Pedro Cortés y Juan B. Soler, «les hablaba despacio pero sabían lo que decía. Como empleado del club era un 10 y como amigo un 11». Nadie podía hablar mal de él. La gente le quería mucho, siempre se hacía querer. Iba a trabajar con buen humor y una sonrisa en la boca, además de ser una persona muy inteligente e intuitiva.

Paco fue fiel a todos los presidentes del club, siempre decía que eso significaba «ser fiel al Valencia». Hay empleados que consideran que «si no hubiera existido Paco Real en el Valencia habría que inventarlo, porque no se puede hablar de la historia del club sin hablar de él». Ayer nos dejó el entrañable ´Coronel´. Descanse en paz.