El de Torrent aprovecha estos días libres para disfrutar del mundo del toro. Una pasión que le inculcaron sus padres cuando era pequeñito y salía corriendo del colegio todos los veranos en Picassent para disfrutar de las vacas con su familia. Este fin de semana visitó la ganadería de Gregorio de Jesús de Sueca, del célebre toro ´Ratón´, y de Machancoses de Picassent junto a sus amigos Pepete, Manolín, Robledo, Paco, Andreu y SUPER. Una tarde de dos orejas y rabo.

¡Cómo ha disfrutado viendo de cerca al toro Ratón!

—¡Sí! La verdad es que es un toro que tiene mucha fama. Es un toro veterano, tiene ya sus años. Es muy bonito para el ganadero y para la gente que tiene detrás verlo cada fin de semana y día a día.

—¿Cuando lo vio por primera vez?

—Hace ya cuatro años. Fue la primera vez que estuve en la ganadería de Sueca viendo a Ratón.

—¿Qué tiene el toro Ratón que no tengan otros?

—Pues que cuando coge a alguna persona, pues insiste. En ´bous al carrer´ vemos muchas cogidas durante el año, pero el toro o la vaca te suelta y no te toca ni te hace brecha. Mis amigos, que tienen varias cornadas, son de enganchadas, de revolcones, que te clava el pitón, pero por suerte no te remata . Al final la diferencia está en que este toro te toca y te remata y eso es lo que ha sucedido desgraciadamente con varias personas. Creo que no es bonito ni para la gente, ni para el ganadero, ni para la afición, pero la gente sabe que cuando se pone delante se expone a un animal que intenta defenderse.

—¿Tiene alguna herida de Ratón alguno de sus amigos?

—No, por suerte, no. A Pepete que este año lo ha recortado dos veces no le ha tocado. Otras vacas sí y tiene bastantes heridas.

—¿Es verdad que Ratón se retira?

—Eso lo tienen que responder los ganaderos. Creo que no se va a retirar mientras la gente le llame para que vaya a los pueblos. Es un toro histórico, que se ha convertido en leyenda y es como para ponerle un museo. Se ha hablado tanto de él en periódicos, televisiones... y pocos toros han hecho tanto ruido.

—Hay gente que está en contra de los toros. ¿Cuál es su opinión?

—Es respetable, claro. Hay gente a favor, hay gente en contra. Hay que respetar siempre, pero también hay que saber que el toro tiene mucha afición en los pueblos, que son fiestas que se han hecho toda la vida y que son tradiciones. Por mí que sigan los toros, claro.

—¿Cuándo nace la afición de Guaita por el mundo taurino?

—¡Desde pequeñito en Picassent! Salíamos los primeros del colegio en verano, teníamos ganas de que vivieran los toros, de disfrutar de ellos con la familia y verlos por el pueblo. También iba a la plaza a ver los recortes. Toda esa afición me la inculcaron mis padres. Tengo muy buenos recuerdos.

—Una difícil, ¿le gustan más las corridas de toros en la plaza o se queda con los ´bous al carrer´?

—(Suspira)Un poquito de todo. Empecé con ´bous al carrer´, luego iba a los recortes con mis padres en la plaza de toros de Valencia y luego fui con mi padre a las corridas. Él fue el que me inculcó ese amor por los toros y cada año pues intento acudir.

—Así que el amor por los toros lo llevaba en la sangre...

—Sí, yo creo que es como un fallero. Al final uno muchas veces es fallero por sus padres, porque te lo han metido de pequeño. Yo, ves, no soy muy fallero. ¡Sí que he tirado muchos petardos... pero me quedo con los toros!

—¿Te atreverías a correr delante del toro si pudieras?

—Me hubiera gustado como una afición más. Me hubiera gustado intentarlo al menos, pero claro, ahora es un peligro. Me conformo con ver a mi gente disfrutar de ellos y de las tradiciones del pueblo.

—Elija, ¿ganadería o portería?

—Las dos. Fui con mis familias a la ganaderías hace tiempo y tengo varios amigos que recortan y cuando puedo y tengo algún día libre aprovecho para ir. Es una buena forma de pasar el día.

—Nos pasamos al fútbol, ¿se parece Ratón a algún futbolista?

—No, a ninguno. Pocos futbolistas hay que hagan daño y que no te dejen salir de un partido. Los futbolistas te pueden dar una segunda oportunidad. Los toros, a veces, no. (Baja la cabeza)

—Para toros este Madrid, ¿no?

—Va a ser un rival difícil, porque es un equipo que este año está haciendo muy bien las cosas, van los primeros de la Liga, pero nosotros también estamos bien, jugamos en nuestro campo y tenemos que salir a ganar y dar una alegría a la afición.

—¿Qué da más miedo, Ratón o Cristiano Ronaldo?

—¡No, miedo no! Respeto sí porque es un jugador importante, pero no miedo. Tiene mayor definición que muchos jugadores, pero también hay otros futbolistas importante en el Real Madrid. Lo mismo que a los toros, hay que tenerles respeto pero nunca miedo.

—Uno de sus primeros grandes partidos fue en el Bernabéu.

—Sí, pero al final Cristiano Ronaldo acabó marcándome dos goles. Es un jugador desequilibrante y hay que tenerlo siempre en cuenta. A él y a todos sus compañeros. Será un partido difícil.

—Ganar sería acercarse al líder.

—Sí, estamos a cuatro y nos pondríamos solo a un punto, pero más allá de hablar de liderato, lo que queremos es hacer bien las cosas para acercarnos más a ellos.

—Ha encajado solo nueve goles y cinco de ellos en dos partidos... ¿Satisfecho o se exige más?

—Me gustaría llevar menos goles. Cada partido es un reto y lo que busco es acabar con una buena media y bajar la del año pasado.

—¿Da envidia ver a Diego jugando la Champions?

—Es una competición bonita, pero también la Liga y la Copa del Rey son competiciones bonitas. Ahora no estoy jugando la Champions, pero está jugando mi compañero y voy a ayudarle en todo lo posible.

—¿Cómo lleva la muñeca?

—Ahí estamos. Me resentí esta semana del dolor que tenía, pero a recuperar cuanto antes para poder ayudar en el próximo partido.

—Que conste que los toros no son los únicos animales en su vida.

—También mis perros. Cuando tengo tiempo libre voy al campo donde me he criado desde pequeñito. Allí paso mucho tiempo. Se llaman Gordo, Gorchi y Chica.

—Sin olvidarnos de sus palomos...

—¡Claro! Lo que pasa es que ahora menos. Los lleva mi amigo porque yo no tengo casi tiempo. Pero cuando puedo sí intento llamarle para desconectar del fútbol y disfrutar de otras aficiones.

—Me han dicho que una de sus últimas aficiones son los caballos.

—Bueno, bueno... tengo un amigo en Huelva que tiene caballos y otro aquí en Valencia y sí que me gusta de vez en cuando ir a verlos, pero mira, les tengo bastante respeto, sobre todo porque no me he criado con ellos desde pequeño.