El caso del juvenil Lucas Torró parece que va para largo, después de que el Alcoyano haya decidido plantarse y no negociar con ningún otro club que no sea el Valencia. «Quiera o no es jugador del Alcoyano. No hay vuelta de hoja. Si quiere irse a otro sitio que no sea el Alcoyano, deberá ser el Valencia, porque para eso hay un convenio de colaboración por el que tienen preferencia por cualquier futbolista de nuestra cantera», aseguró ayer sin titubeos Juan Serrano, quien lamentó la actitud del jugador de no escuchar los consejos del club, «cuando hay gente lo suficientemente preparada para dejarse asesorar», añadió.

El mandatario deportivista, bastante molesto con lo sucedido con el mediocentro de Cocentaina, de 17 años, se mostró más tranquilo

después de entrevistarse ayer con Manuel Llorente y toda su cúpula técnica, con Braulio Vázquez al frente. A la cita, además, acudieron el gerente Fernando Ovidio y el director deportivo blanquiazul, Toni Torres. En el Alcoyano se temía que pudieran surgir asperezas a raíz de la negativa del jugador a firmar un contrato con los blanquinegros y escuchar los cantos de sirena del Real Madrid, con quien ha llegado a un acuerdo verbal.

«Al Madrid ya le hemos dicho que no vamos a negociar. Se lo han tomado muy mal, pero me da igual. Han actuado con cierta prepotencia y a espaldas del club, algo que no debería ser así en una entidad de tanto prestigio. Nosotros nos debemos al Valencia, y el jugador ya sabe nuestra postura. Es más, le hemos enviado un burofax con una propuesta de trabajo, en la que le ofrecemos un contrato profesional con la primera plantilla del Alcoyano, cubriéndonos así las espaldas por si el entorno del jugador quiere ir más allá», confesó Serrano después del encuentro con Llorente y compañía.

Después de este paso del Alcoyano, la pelota ahora está en el tejado de Lucas Torró, que deberá elegir entre firmar este contrato que le vincularía en el futuro con el Valencia, o seguir la vía legal en caso de estar empeñado en vestir la camiseta del Real Madrid. «Me enciendo cuando escucho que estamos cortando la progresión del jugador. Aquí le estamos ofreciendo un contrato de trabajo para jugar en Segunda División y en Madrid le quieren para jugar en el juvenil B de Liga Nacional», explicó Juan Serrano, quien quiso pasar página y olvidarse de este caso.