La Real Sociedad ha rehabilitado su imagen después del tremendo fracaso en la Copa del Rey y lo ha hecho a lo grande, tras vencer después de quince años en el siempre complicado campo de Mestalla.

Quizás tenga que enlazar otra buena actuación la próxima semana ante el Atlético de Madrid para conseguir el perdón definitivo de su afición, pero su proceso de contrición va por muy buen camino con una victoria que deja unas sensaciones enormes.

Los donostiarras, colistas de la clasificación hace mes y medio, han ganado tres partidos y empatado otros cuatro en los últimos siete encuentros de Liga y todo con una imagen de solvencia que invita al optimismo en el corto y medio plazo.

Trece puntos después han conseguido dejar atrás los puestos de descenso y, con dos encuentros seguidos en Anoeta ante el Atlético de Madrid y Sporting, pueden empezar a mirar hacia arriba a poco que mantengan su buena imagen.

La solvencia defensiva en los últimos choques, nada que ver con lo que se presenció en el Iberostar en aquel "gran accidente", como lo definió Philippe Montanier, ha sido la clave de su recuperación ya que han encajado un solo gol en los últimos cuatro partidos y con dos tantos marcados han arrancado seis puntos, toda una fortuna.