Los aficionados del Philips Stadion han tenido la suerte de disfrutar cada semana de algunos de los mejores delanteros de la historia. Allí brillaron con luz propia Romario de Souza, que después jugaría también en Mestalla, y Ronaldo, pero en el casi centenario feudo del PSV Eindhoven —inaugurado el 31 de agosto de 1913— también dejó su sello uno de los grandes delanteros del Valencia: Cláudio ´Piojo´ López. Su gol en la última visita del Valencia a este estadio, el 21 de septiembre de 1999, fue distinguido por la UEFA como el mejor de todos los que se consiguieron en aquella edición de la Champions 1999/2000, en la que el equipo dirigido entonces por Héctor Cúper llegaría a la final.

El gol, que hoy se puede ver en imágenes en nuestra edición digital superdeporte.es, fue antológico, de los que se ven muy pocos. Y fruto de una jugada ensayada sobre la pizarra del técnico argentino. Apenas habían transcurrido tres o cuatro minutos del partido cuando el árbitro, el noruego Rune Pedersen, señaló una falta cerca de la línea que divide el campo por la mitad, unos tres metros en terreno del Valencia. Era una falta sin aparente peligro, pero a los defensas del conjunto holandés los pilló en frío. Carboni envió el balón en largo hacia el área buscando la espalda de los centrales, que estaban muy adelantados, y el meteórico desmarque del Piojo López, que sorprendió por completo a sus marcadores. Pero lo mejor estaba por llegar porque Cláudio, tal como le llegaba el balón por la espalda y sin dejarla caer al suelo, enganchó una volea con la pierna izquierda letal para el meta del PSV, que lógicamente cuando se quiso dar cuenta ya la tenía prácticamente dentro.

Más rápido que el ojo

Rozaba el Piojo la situación de fuera de juego, pero nadie podía asegurar que el gol no era legal porque Cláudio era mucho más rápido que el ojo humano. Ni siquiera los jugadores del PSV y los aficionados protestaron. El zurdazo fue tan bello y rotundo que en el estadio sólo se escuchó el silencio, seguido de las muestras de alegría del Kily González, que le hizo hasta la reverencia a su compañero, y el resto de compañeros que fueron llegando a la piña: Gerard, Mendieta, Juan Sánchez y David Albelda.

No por ser en el Philips Stadion, pero aquel gol iluminó al Valencia y al propio delantero. El equipo de Cúper llegaba a Eindhoven con problemas en la Liga, como ahora pero mucho peor, porque llevaba cuatro derrotas en los primeros cuatro partidos y por supuesto era colista. Para el Piojo, además, el gol fue el fin a una larga sequía, vivía un momento delicado en el equipo porque no terminaba de adaptarse a los métodos de Héctor Cúper. Ese año de hecho llegaría a estar apartado del equipo.

Ernest Faber también jugaba

David Albelda fue titular en el partido disputado en septiembre de 1999, correspondiente a la liguilla de la Champions en la primera participación del Valencia en esta competición. Es la última vez que el Valencia jugó en Eindhoven. El actual capitán acababa de cumplir 22 años y lucía el dorsal 23. También fue titular en ese partido el técnico que acaba de firmar el PSV, Ernest Faber, que posiblemente esta noche estará en el banquillo con Phillip Cocu. El defensa fue sustituído en el minuto 55.