El FC Barcelona cerró el míercoles el contrato de su nuevo entrenador, Tito Vilanova, y en la hoja de ruta el objetivo inmediato es el fichaje de Jordi Alba. Hace una semana el presidente blanquinegro Manuel Llorente suspendió la reunión que iba a mantener en la ciudad condal con Andoni Zubizarreta y Josep María Bertomeu debido al seguimiento mediático que observó alrededor de la misma, pero esta circunstancia no cambia el fondo de la cuestión y en las próximas horas ha de producirse el acuerdo.

Sobre ello le preguntaban a Jordi Alba en la concentración de la selección española en Gniewino, pero el internacional del Valencia se mantiene al margen: «Ya les dije a mis agentes que no quería saber nada que no tuviera que ver con la selección, estoy aquí centrado y muy a gusto con el equipo y con ganas de jugar el próximo partido», declaró a Cuatro.

Antes, en la rueda de prensa oficial celebrada en el Arena de Gdansk, le preguntaron por el partido y en especial por el hecho de tener ya una cartulina amarilla: «Condicionar, está claro que siempre condiciona. Son dos tarjetas las que conllevan la suspensión. A mí me queda una. Intentaré ser lo más limpio posible, pero hay que ayudar al grupo y si tengo que hacer una falta de tarjeta, pues se hará», explicó.