Centro milimétrico de Guardado desde la izquierda y remate de Jonas. El gol ante el Oporto fue el mejor ejemplo de lo que Pellegrino busca para el ataque. El técnico argentino quiere un equipo vertical y punzante por las bandas. Cumplidas las tres primeras semanas de trabajo, el Valencia ya ha empezado a mostrar cierta evolución y el máximo aprovechamiento de los carriles es una de las señas de identidad. En ese sentido, la llegada de Guardado y Joao Pereira ha dado una dimensión mayor a la plantilla. Descaro para encarar, energía para llegar al ataque y un golpeo preciso. Feghouli, Pablo, Piatti, Mathieu o Bernat, el Flaco tiene un buen ramillete de peloteros de para las alas.

En los partidos disputados durante la estadía en Alemania ya se vio un poco de todo eso. Pellegrino está trabajando para dotar al Valencia de los recursos necesarios para hacer saltar cualquier defensa y la amplitud es una de los conceptos más eficaces, uno de los factores por excelencia en el fútbol. La sociedad que han formado Mathieu y Andrés Guardado resulta sugerente y prometedora. Los desdoblamientos defensivos y las proyecciones en ataque son permanentes. La primera misión de los laterales es defender, pero cuando el Valencia inicia el juego, los dos deben estar abiertos y prestos para apoyar en ataque. No se trata de incorporarse a lo loco, sino de producir ocasiones y alternativas ofensivas de más calidad. Todo sin descuidar la faceta defensiva. La fórmula exige mucho entendimiento, por eso a los centrocampistas les pide ayudas constantes, intensidad, diálogo. Ya es habitual ver a Parejo echando un cable en defensa y cubriendo las espaldas del lateral. Y lo mismo se exige a los interiores. Guardado ha encajado el concepto a la perfección, mezclando participación en ataque con sacrificio defensivo. Calidad y eficacia. El mexicano comenzó su carrera en Atlas actuando de lateral izquierdo, como carrilero, incluso Pellegrino lo contempla como una alternativa factible para dar una versión ofensiva a la posición de tres. Un cambio del centro del campo a la defensa que ha llevado a la práctica con Juan Bernat. El interior zurdo ya ha actuado en la zaga en esta pretemporada. Ha cumplido por energía, genio y despliegue.

Una zurda certera

El encuentro ante el Arminia de Bielefeld dejó un detalle que vale para entender lo que Pellegrino pretende. El entrenador insistió a Pablo en que debía participar también por dentro para dejar hueco para las llegadas de Antonio Barragán por fuera.

La llegada de Andrés Guardado ha enriquecido el ataque del Valencia. El mexicano dejó ante el Oporto su primera asistencia de la pretemporada. Fue una acción que define una parte esencial de su fútbol. El curso pasado dejó 12 asistencias y fue el mejor jugador de la Liga BBVA en centros al área y asistencias de remate.