El entrenador del Betis, Pepe Mel, se mostró indignado tras el partido que su equipo perdió en Mestalla, criticó al árbitro, preguntó cómo se lo iba a explicar el presidente del comité arbitral, Victoriano Sánchez Armiño, en la reunión del lunes y dijo que se le había quedado cara de "gilipollas".
El árbitro pitó un penalti a favor del Valencia que, según Mel, se produjo fuera del área y expulsó a Amaya a los quince minutos de partido.
El técnico considera que debió expulsar en la segunda parte al valencianista Mathieu por un agarrón a su jugador Ribérn Castro y recordó que el árbitro, César Muñiz Fernández, le había dicho al jugador que si quería que le pitara penalti debía tirarse.
En su opinión, esta jugada se produjo dentro del área y Mathieu al menos se merecía la tarjeta amarilla, que era la segunda.
"El resultado es violentamente injusto porque, como mínimo, merecimos empatar. Hemos hecho lo suficiente como para no perder. Parece que el Betis es el tonto de la Liga", señaló.
Agregó que el Valencia no tiene nada que ver con esto; "el Valencia ha hecho lo correcto y nos ha marcado tres goles", agregó Mel, quien señaló que tras esta "rajada" sabe que le mirarán con lupa.
"No es la primera vez que las decisiones arbitrales nos perjudican", agregó Mel, quien no se pronunció sobre el juego desarrollado por su equipo.
