Una buena segunda parte fue suficiente para que el Espanyol consiguiera doblegar la resistencia valencianista. Pese a esto, los blanquiazules solamente obvtuvieron una escasa ventaja en una segunda mitad que dominaron por completo y en la que pudieron ampliar la renta de cara al partido de vuelta. El primer tiempo fue muchísimo más igualado, con ambos equipos midiendo fuerzas y sin querer arriesgar demasiado. Teniendo en cuenta esta versión ofrecida por el Valencia durante los primeros 45 minutos, el partido de vuelta invita al optimismo. De hecho, el equipo dirigido por Rubén Baraja pudo haber anotado un valioso gol fuera de casa a falta de diez minutos para el final tras un buen robo y tiro por parte de David, una de las pocas ocasiones del Valencia.

La vuelta será en Mestalla

La resiembra del césped de la Ciudad Deportiva de Paterna y el hecho de poder usar Mestalla como escenario de otro partido importante hacen que el Juvenil A vaya a disputar el partido de vuelta en el estadio valencianista. Rubén Baraja y sus pupilos buscarán dar la vuelta a la eliminatoria tomando como referencia los primeros 45 minutos del partido de ida y buscando el empuje y posible miedo escénico que provoque Mestalla.