La ambición de Carles Gil es la viva imagen de un Valencia que en cinco jornadas ha conseguido colocarse líder de la Liga BBVA por delante de equipos que temporadas atrás parecían inalcanzables. El centrocampista valenciano está convencido de que el liderato actual no es una simple anécdota ni fruto de la casualidad, una creencia en sus propias posibilidades que demuestra también con la misma fuerza. El jueves frente al Córdoba Carles se convirtió con 44 minutos de juego en uno de los protagonistas de un segundo tiempo tan excelso como el primero. Si el Valencia desprende un aroma que embriaga a Mestalla, el crecimiento en la sombra del mediapunta también promete más y mejores tardes. «Entrenando, jugando, en todo me siento mucho mejor jugador que en el Elche. Me veo más preparado porque entrenar con jugadores de tanto nivel como los que tiene el Valencia a uno le sirve para crecer más rápidamente», dice sin dudarlo.

En las últimas semanas Carles Gil ha ido ganando terreno entre los pensamientos de Nuno Espírito Santo. El entrenador exige y Carles responde. Entre los deberes que el portugués le impuso estaba el de ganar masa muscular para fortalecer su fisonomía y, al mismo tiempo, poder cumplir con la presión asfixiante que la filosofía del míster requiere. «¿Si exige Nuno? Creo que ya se ve. La clave es esa, que Nuno nos exige mucho por el bien del equipo y del jugador. Quiere mucha intensidad. El cuerpo técnico está pendiente de todo. Nos hace que salgamos muy fuertes al campo», explica el futbolista.

Al extraordinario funcionamiento del once que más ha jugado con Nuno se han unido aportaciones notables desde el banquillo encabezadas por Sofiane Feghouli. Carles ha entrado con energía en esa tropa de refuerzo en la que están hombres como Mustafi, Lucas Orban o Cancelo y, con algunos minutos menos, Roberto Ibáñez, Zuculini y Filipe Augusto. Contra el Córdoba aumentó su cuota de protagonismo después de haber sumado 16 minutos ante el Málaga y ocho frente al Espanyol. «Tenía ganas de tener algo más de tiempo y poder ayudar. Tuve la suerte de tener más minutos y estoy muy contento por eso y, sobre todo, por la marcha del equipo. A día de hoy es casi perfecta», comenta.

En prácticamente media parte el ´22´ del Valencia se asoció de maravilla con Parejo, André Gomes, Alcácer y Feghouli. El 96% de sus pases fueron certeros. Además, del pie izquierdo de Carles nació la asistencia del 3-0 obra de Feghouli. Con la misma zurda dejó en bandeja a Paco el que pudo ser el cuarto o lanzó el córner que cabeceó en las alturas Otamendi. Tampoco faltó el agobiante pressing a toda cancha que propició el error del portero antes de un disparo de André que por poco no acabó en gol. «Se dieron jugadas clave, al final la que entró fue la de Soso, que cerró el partido€». Y el liderato. «Sí, pero ir primeros le importa más a la gente que a nosotros. Pero claro es bonito verse en lo más alto. Por ahora es un número. Estamos a principios de Liga y me quedo con la sensación y dinámica tan positivas que tiene este Valencia», añade.

El valenciano de 21 años admite fríamente que a estas alturas ser líderes es «un número», aunque no es algo anecdótico, sino que es la recompensa al trabajo bien hecho. «Las cinco jornadas que hemos hecho no son anecdóticas, cinco jornadas en las que se ha demostrado que este equipo no va de broma. De todos modos, en lo único en lo que pensamos a día de hoy es en ir a Anoeta y seguir demostrando eso, que ahí arriba no estamos por casualidad. El Valencia llega al partido contra la Real Sociedad en muy buena forma y dispuesto a ganar».

Uno de los factores que suman a favor en el renovado Valencia es la actitud positiva de los que menos juegan y las ganas de luchar por un hueco en el once. La competencia se entiende como un valor que mejora al equipo y a cada jugador. «Cuando vienes a un grande hay jugadores de mucha calidad. Eso ayuda y suma para uno mismo. Da gusto jugar con André, Parejo, Soso€ Pero si no me viera capacitado para ser titular no hubiese venido. Son muy buenos, pero yo confío mucho en mí y en ir ganando minutos y un puesto», concluye el talentoso mediapunta.