Cheikhou Kouyaté, el mejor jugador en la última jornada de la Premier League inglesa, esperó el pasado verano al Valencia hasta el final, aunque acabó fichando por el West Ham ante la indefinición del club de Mestalla. El futbolista de origen senegalés firmó un golazo en el partido ante el Manchester United y sumó una valoración total de 8'93 puntos, la mayor de los once futbolistas que forman el equipo de la semana entre los que está también el exvalencianista Carles Gil. El Valencia llegó a tener cerrado su acuerdo con el futbolista hasta en tres ocasiones, aunque su fichaje se frenó después de la primera reunión de Salvo y Rufete con Jorge Mendes. Era entonces el mes de junio, en un momento en que la venta a Peter Lim todavía no se había cerrado y el club no podía acometer esta operación sin el respaldo del inversor, que en ese momento se dejó influenciar por la opinión del superagente.

Kouyaté lleva dos goles y dos asistencias esta temporada con el West Ham, que lo fichó del Anderlecht belga por 7,5 millones de euros, un valor que en sólo seis meses ha subido como la espuma. La secretaría técnica del Valencia vio en este futbolista de 24 años un enorme potencial para explotar tanto en el centro del campo como en la defensa. De hecho, en su actual equipo ha jugado como interior, mediocentro defensivo y ante el Manchester lo hizo como central, una posición en la que aporta aparte de su presencia física una cualidad que le vendría de maravilla al equipo de Nuno Espíritu Santo: salida de balón desde atrás. Hoy, Kouyaté es uno de los futbolistas más seguidos por los grandes de la liga inglesa y otros clubes de Europa.