La recuperación de una lesión como la que sufre Matt Ryan nunca es fácil, pero se hace más llevadera si te rodeas de tu gente. Es lo que le ha pasado al portero del Valencia este fin de semana. El australiano, en su intento de acortar plazos, ha recibido una bocanada de fuerza y energía con la visita a Valencia de su ´hermano´, como así le llama, Bernie Ibini. A los dos les unen muchas cosas. Coincidieron en Australia y el Brujas este verano. Desgraciadamente, ahora les une una lesión. Este fin de semana se han unido en la capital del Turia para animarse mutuamente. «No puedo decir que planeamos o queríamos compartir esta experiencia ´paralizados´ , pero ambos estamos empujando la barrera a la espera de cosas más grandes y mejores. Encantado de acogerte, hermano», escribió Matt Ryan, con un hastag #CripLife, «vida de lisiados»

Ibini es uno de los grandes amigos de Matt en el mundo del fútbol. El destino les unió hace seis años. Bernie nació en Nigeria, pero emigró a un barrio de los suburbios de Sydney cuando era un niño. Allí hizo realidad su sueño de jugar al fútbol. En 2009 ingresó en el australiano Central Coast Mariners, el equipo en el que un año después recalaría Matt. Allí forjaron una bonita amistad durante tres temporadas, hasta que Ryan hizo las maletas a la liga belga. El fútbol quiso juntarlos este verano en el Brujas. La aventura duró poco. Hasta que Ryan aterrizó en Valencia. Ambos empezaban entonces dos nuevos e ilusionantes caminos que han encontrado una piedra: las lesiones. Ibini se rompió el peroné y estará cuatro meses de baja. Las maletas le acompañan en su viaje a Valencia. Tampoco ha tenido suerte Ryan. El australiano sufrió una rotura de menisco de la pierna derecha que le mantendrá apartado de los terrenos de juego mes y medio. La suerte no les ha acompañado, pero la amistad lo hará siempre. Aunque lesionados y con muletas, juntos son más fuertes. Ya les queda un día menos de su «vida de lisiados».