El castigo de los dirigentes del Sporting de Portugal al extremo André Carrillo no puede ser ya más evidente. El futbolista, que ha roto las negociaciones para renovar su contrato que expira el 30 de junio, volvió a quedarse por segunda vez en apenas cinco días fuera de la lista de convocados elaborada por el técnico Jorge Jesús, esta vez para el partido de liga que su equipo disputaba anoche ante el Nacional de Madeira. La situación, sin embargo, no puede ser más tensa. Según medios portugueses, Jorge Jesús sí había incluído a André en la citación, pero cuando se preparaba para viajar el jugador recibió un mensaje del propio presidente del club invitándolo a entrenarse a la mañana siguiente con los no convocados. Y así lo hizo.

Jorge Jesús, su entrenador, argumentó el día del Lokomotiv que la ausencia del extremo peruano se debía a cuestiones técnicas, en esta ocasión sin embargo se había negado a hacer comentarios sobre ello. Hay medios que apuntan a que el presidente del club, Bruno de Carvalho, llegó a advertir al extremo de 24 años que no volvería a jugar hasta que se llegue a un acuerdo para prolongar su contrato con el Sporting.

Carrillo, titular en todos los partidos con el Sporting hasta que el pasado jueves fue excluido en el estreno en Europa ante el Lokomotiv de Moscú, ha sido seguido con interés por clubes como Valencia CF, Inter de Milán, Oporto o Benfica. El club de la capital sospecha que alguno de estos equipos está detrás del desacuerdo en la ampliación de su contrato, motivo por el cual han decidido que por el momento no vuelva a jugar. El Valencia CF está atento a la situación del futbolista.

Habla su padre

La posibilidad de que André tenga un acuerdo con otro club fue desmentida este lunes por el padre del futbolista, Álex Carrillo, con esta respuesta a través de las redes sociales a un aficionado del club lisboeta: «Esta es la última vez que digo algo acerca de mi hijo. Lo repito, no tiene compromiso verbal o escrito con ningún equipo, ya sea en Portugal o en cualquier otro país. Además, no es por el dinero que no hemos llegado a un acuerdo. Estamos muy agradecidos con el Sporting, si no hay acuerdo entre las partes, estas cosas pasan. Nadie puede obligar a alguien en cuestiones laborales. Esperemos que todo se resuelva y le deseo lo mejor al Sporting», concluye.