No hay excusas. El Valencia abandona el Sánchez Pizjuán con su segunda derrota en tan solo una semana. Lejos de dar con la reacción, el conjunto de Nuno tropieza con el Sevilla de Unai Emery en un encuentro que puede resumirse en un constante querer y no poder. El técnico portugués no pudo contar de inicio con André Gomes „aquejado todavía de sus molestias en el gemelo derecho„ y anudó su plan en torno a un dibujo con cuatro centrocampistas, con Santi Mina y Paco Alcácer en el frente del ataque, si bien el protagonismo ofensivo del equipo fue escaso. El Sevilla fue superior en todos los aspectos y añade otra muesca a las aspiraciones del conjunto de Mestalla que agota el crédito de Nuno en el banquillo valencianista.

El encuentro comenzó con la sorpresa de Ryan en el once titular. El australiano, pese a que no fue capaz de mantener su portería a cero, salió bien parado del apuro de tener que suplir a Jaume, el futbolista más en forma del Valencia. Un partido más, el portero volvió ser el más destacado de todos los jugadores blanquinegros. Y cuando eso ocurre, algo falla. Tanto fue así que el Valencia apenas inquietó los dominios de Sergio Rico y no protagonizó ni una sola ocasión de peligro en todo el partido. El acercamiento más claro llegó tras un mal pase de Banega pero ni por esas. En el 35', Cancelo vio la segunda amarilla por un manotazo sobre un contrario, lo que contrastaría una estadística: el Valencia no ha conseguido acabar con once en ninguna de las últimas seis visitas al Pizjuán.

Sin necesidad de armar grandes despliegues, el Sevilla impuso su superioridad y fue tras el descanso cuando consiguió estrenar el marcador. Escudero, en una internada por la izquierda, descosió a Vezo y Enzo Pérez, encargados de cubrir al sevillista en la marca, que asistieron a la maniobra en primera fila. A pesar de la acumulación de efectivos en el centro del campo, el Valencia no consiguió dominar en la parcela ancha y menos después del tanto del Sevilla. Fue a partir de entonces cuando el partido comenzó a deslavazarse, con el conjunto valenicanista a merced del equipo de Emery. El Valencia no hizo méritos como para armar una remontada y en el último tramo Javi Fuego fue expulsado. Tampoco jugará ante el Barça.