La última vez que Nuno aseguró tener «un plan», el equipo acabó difuminado en la paleta de grises ante el Atlético de Madrid. Aquella noche del Calderón añadió una muesca importante a la relación de la plantilla con el técnico, que hasta aquel entonces controlaba un sector aunque reducido del vestuario. Un mes y unos días después, el técnico vuelve a medirse a un rival enmarcado en las mismas aspiraciones que las del Valencia. Y de nuevo, un plan. «Jugar con cinco centrocampistas es una opción, tenemos un plan de partido y lo pondremos en práctica mañana», dijo en su comparecencia de prensa en referencia una estrategia que lleva acariciando a lo largo de los últimos días pero que tiene una pieza clave. Un futbolista referencial, sin el que las posibilidades de éxito se reducen de forma considerable. Se trata de André Gomes, llamado a liderar el frente ofensivo del Valencia para plantar la bandera en el Sánchez Pizjuán. El ´21´ tiene en vilo al entrenador. Y es que no se ejercitó este sábado en el último entrenamiento antes de viajar a Sevilla, aquejado de unas molestias en el gemelo derecho que tienen en el aire la disposición del Valencia en la primera de sus cuatro próximas finales.

La contribución de André es innegociable y en el posible caso de que no estuviese listo para competir al cien por cien, existen grandes posibilidades de que Nuno arbitre una solución de emergencia y apueste por un el «plan» B, su 4-3-3 habitual, en lugar del 4-5-1 que lleva trabajando en los últimos días. «Vamos a valorar mañana cómo está, hoy no ha entrenado pero creo que mañana sí podrá participar en el partido. Ha entrado en la convocatoria», decía el técnico después del entrenamiento del sábado. André, por cualidades, aportaría al sistema movilidad, profundidad y recorrido, partiendo desde la izquierda y brindando soluciones para el delantero, que en este caso será Paco Alcácer. Nuno quiere que juegue y si su estado físico no peligra, jugará en el Pizjuán. Es la conexión que activa todo el engranaje, con el que Nuno pretende que los jugadores estén más juntos y crezcan desde la acumulación en la medular, siempre que los laterales no queden desprotegidos, eso sí. Esta apuesta sorprende y es que nunca antes la ha utilizado en un partido oficial. La temporada pasada, por ejemplo, sí que echó mano de un rondo táctico con cuatro mediocentros cuando no pudo contar con Piatti y Feghouli, como fue el caso del encuentro frente al Sevilla, precisamente, con Fuego, Parejo, André y Enzo Pérez. El precedente más reciente fue ante el mencionado batacazo en casa del Atleti, todo un despropósito táctico, en el que juntó a Enzo Pérez, Danilo, Parejo y André, generando confusión en el reparto de las parcelas y convirtiendo el equipo en un auténtico embudo. Sin soluciones, sin consistencia, devorados por la presión de los colchoneros y flaqueando en defensa. Nuno quiere proteger el centro del campo, habida cuenta de que la pareja formada por Aderllan Santos y Abdennour no ofrece grandes garantías, especialmente por el brasileño, que entraría en detrimento de un Rúben Vezo que no acaba de convencer en sus oportunidades. Nuno busca músculo para ganar la batalla al Sevilla y el ritmo y la intensidad de André son determinantes para que todo funcione como es debido y lance al equipo más cerca del área del Sevilla. «El plan» está pendiente de André.