Stefan de Vrij era el central elegido como recambio de Nico Otamendi. El nombre del zaguero neerlandés, que lleva tiempo asociado al Valencia CF, pudo llegar como refuerzo principal para la retaguardia el pasado verano. La información de La Gazzetta dello Sport es concreta: la Lazio rechazó una oferta del 30 millones de euros por De Vrij procedente de Mestalla. La negativa de la entidad romana se devió a dos cuestiones fundamentales: la importancia del central (ahora en pleno proceso de recuperación de una lesión de rodilla) y los retos deportivos de la Lazio, la previa de la Champions -que no superó ante el Bayer Leverkusen- y la Supercopa de Italia ante la Juve fueron los obstáculos principales entonces.

Después del «no» de la Lazio por De Vrij, fue turno para Aymen Abdennour, que se mantenía en la recámara y pasó a ser el objetivo número uno, por esta cuestión entre otras. El Mónaco recaudó 25 millones de euros por el central tunecino, figura de la última Champions y de la Ligue 1 francesa. El destino juega en el fútbol de forma caprichosa. De Vrij sólo pudo participar después en cinco encuentros. Los problemas en su rodilla izquierda derivaron finalmente en una intervención que le tendrá fuera de los terrenos de juego hasta el próximo mes de junio, como mínimo. De Vrij y el Valencia han vuelto ha ocupar portadas en la prensa italiana por la revolución que la Lazio está dispuesta a emprender, vendiendo a sus jugadores franquicia para reforzar la plantilla a todos los niveles. Candreva, Lucas Biglia (otro jugador ligado al Valencia, tasado en 28 millones de euros) o Felipe Anderson, intransferibles hace cinco meses ahora se venden por la propuesta justa.