No es momento para que los periodistas andemos con postureos porque quien está ofendido y asustado es el aficionado, por ello me guardo mis malas noches y traslado los sufrimientos de los aficionados con el ánimo de que alguien tenga el valor de traducirle esto a Neville. Gary, eres el entrenador del Valencia y nos estamos ahogando, por lo tanto, tienes mi apoyo al menos hasta que empiece el partido. No pesará sobre mi conciencia lo que pase el sábado en Mestalla, pero he de decirte una cosa; entiendo que cuando sales en rueda de prensa y le dices a un periodista que no conseguirá enfadarte por más que te pregunte por tu futuro, y que cuando lo dices sonriendo y casi a carcajada limpia, es porque estás nervioso, pero Gary, ´carinyet´, los periodistas no te preguntan por tu futuro porque quieran enfadarte, lo que pasa es que tú eres el entrenador del Valencia y no ganas. Para que entiendas te contaré lo que me pasó ayer. Resulta que cuando el Valencia va mal es muy protagonista en las teles de la meseta, -para entender lo de ´la meseta´ tienes que estar mucho tiempo en Valencia y no va a ser tu caso- y ayer sacaron tu rueda de prensa y justo el instante en que te ríes cuando preguntan por tu futuro. Pues bien, me llamó un aficionado del Valencia de esos que sufre cada fin de semana, sufre tanto que a veces no puede ver ni los partidos y le deja el pase a su hijo. El sufrimiento le supera. Pues bien, me llamó Salva indignado al verte reír en rueda de prensa y lo noté diferente. Él es muy hablador pero apenas decía nada, y de repente rompe a llorar: «Carlos, sen anem a segon divisió i el ´entrenaor´ està riguentse en la sala de premsa... Si anem a segon divisió, anem a segon divisió, pero que no se riga dels valencianistes». Mientras lo escribo se me hace un nudo en la garganta al recordarlo y espero haber sido capaz de transmitirlo de manera fiel para que usted, amigo Gary, lo entienda. Al poco, Javi Valero me envía una foto de su hija Jimena y me dice que cuando el Valencia bajó a segunda él era pequeño y que espera que su hija no pase por lo mismo. José Dolz me dice que si el Valencia «se va a segunda, yo me voy con él» y Juan Carlos Galindo asegura que irá a Mestalla el día del Barça, con su hijo, porque «es un placer que me ha dado la vida y al que no pienso renunciar».

PD: ¿No les suena raro pedirle a la gente que vaya a Mestalla si el primero que no aparece es el dueño?

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