Lo hizo. De la docena de partidos que el Valencia llevaba sin ganar en la Liga, quizá era este el que peor pintaba, con 0-1 en el marcador mediada la segunda parte y Mestalla en estado de shock. De poco habían servido hasta ese momento los mensajes de apoyo, la movilización total para estar con el equipo en este momento delicado, un recibimiento espectacular en la puerta del estadio. A pesar del mal partido que estaban brindando los jugadores, ni un reproche, ni un silbido en Mestalla. Así, al final, la pelota entró. Primero Negredo y después Cheryshev dieron la vuelta a un marcador terrible que metía de lleno al Valencia en la pelea por la permanencia, dan oxígeno al equipo y a su entrenador, que más de dos meses después lograba su primera victoria en la Liga.

El Espanyol frenó en seco la arrancada del Valencia con una clarísima ocasión de Caicedo, que se encontró con la mano prodigiosa de Diego Alves. Sí, Alves, casi nueve meses después y como si no hubiera pasado nada, regresaba al equipo titular para salvar al equipo en su primera intervención. El remate del delantero, buscando el contrapié, no sorprendió al brasileño, que aguantó lo suficiente para poner la mano y evitar un gol cantado.

Aún así, era un serio aviso de que el equipo visitante llegaba mentalizado para sorprender al Valencia con transiciones rápidas. Entre eso y el cambio de Abdennour a los siete minutos, que se volvía a lesionar tras apenas diez minutos de partido, había miedo en el cuerpo. Defendía el Valencia con Vezo y Santos en el centro, con Cancelo y Siqueira en los costados. Era el brasileño el que más empujaba por la izquierda y por ahí el equipo entraba con determinación. Alcácer estaba a punto de meterla tras un servicio desde ese lado de Rodrigo y Parejo lo intentaba en dos ocasiones con lanzamientos de falta. El Espanyol perdía también un hombre en el minuto 11, cuando Mamadou se lesionaba y era sustituído por Gerard.

La tensión se podía cortar en Mestalla y eso se reflejaba en el campo, donde había más nervios que fútbol. El partido decaía y, sobre todo el Valencia, no era el que se esperaba, ni en intensidad ni en presión ni generando ocasiones. Casi nada de nada, solo la grada mantenía el pulso a la espera de que las cosas pudieran cambiar en la segunda mitad. Salía el Valencia más enchufado y a los cinco minutos un centro chut de Cancelo que se estrellaba en el palo lo remataba finalmente Cheryshev ligeramente alto. Un minuto después, sin embargo, Moreno se hacía con un balón y Santos se la arrebataba para tirarla a córner cuando se disponía a fusilar la portería. Ese saque de esquina resultaría fatal. Óscar Duarte entraba con fuerza desde atrás para quitarle el balón de las manos Alves y marcar el 0-1.

Terrible mazazo en Mestalla, pero mucho patido por delante para sufrir e intentar la remontada, aunque todo estaba a punto de irse al traste un instante después. Otra vez Duarte y después Diop estaban a punto de hacer el segundo, pero esta vez se encontraron con Alves esta vez en modo milagro, después de no haber estado bien en la acción del gol. Neville, mientras, se movía en la banda y daba entrada a Negredo por Rodrigo, que llevaba medio partido desaparecido. Se lanzaba al ataque el Valencia aunque las sensaciones no eran buenas, con el rival totalmente metido en su terreno. Había que romper de alguna manera la barrera y lo hizo Cancelo. Entró sorteando rivales y, aunque se le fue un poco larga, tocó de últimas lo suficiente para que Negredo rematara a la red con la colaboración de un defensa. Algo más de 20 minutos por delante para hacer un gol.

Superada la media hora casi 50.000 aficionados contienen la respiración cuando Duarte, otra vez, se eleva para rematar un saque de esquina rozando el poste. Se fue y esa acción cambió la historia. En la continuación, Cancelo y Feghouli montán la jugada por la derecha y el centro de Feghouli, preciso desde la línea de fondo, lo remata en plancha Cheryshev... con la cabeza y con el empuje de todo Mestalla. Así le daba la vuelta a un partido que tenía la peor pinta para el Valencia. A partir de ahí todo fueron opciones para el Espanyol, que rozó el empate sobre todo en un remate de Gerard cruzado que se fue por la línea de fondo por muy poco. La defensa del Valencia era un flan, pero entre Alves y los nervios también del rival el marcador ya no se movería más.

[if IE 9]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie9.widgets.opta.css" media="screen"/><![endif][if IE 8]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie8.widgets.opta.css" media="screen"/><![endif][if IE 7]><link rel="stylesheet" type="text/css" href="http://widget.cloud.opta.net/2.0/css/ie7.widgets.opta.css" media="screen"/><![endif]