El exjugador y exdirector deportivo del Valencia CF, Amedeo Carboni, dejó varias reflexiones interesantes en su visita al ‘Supermurciélago’ de Levante TV que dirige Vicent Sempere. El italiano, conocedor en primera persona del trabajo de Pako AyestaranPako Ayestaran, avaló la incorporación del vasco porque «conoce el ambiente» y «está en la cabeza del jugador más que otros». El de Arezzo que está sacándose el carnet de entrenador, también reconoció tener miedo al comprobar los «errores gordos» que ha cometido un exjugador de la experiencia de Gary Neville. «Pako conoce el ambiente, es su ventaja, es un entrenador-preparador y está en la cabeza del jugador más que otros. La gran decepción de Gary Neville -y estoy hablando del capitán del United, ha ganado Champions, que tiene mucha experiencia- es que tuvo fallos de novato. Por eso me da miedo y Pako lo que ha hecho es intentar arreglar un poquito el equipo, no tiene tiempo para más, y hacer las cosas claras y sencillas para el jugador. Pako le ha dado sencillez al trabajo. Me ha preocupado lo de Neville, si alguien con esa experiencia tiene fallos gordos de novatos...te da miedo», aseguraba.

El italiano ha compartido varios días de entrenamiento con Pako y detecta problemas en la salida de balón. «El Valencia tiene un problema en la salida de balón desde atrás. Se tiene demasiado el balón y Pako está trabajando en ello». Amedeo es crítico con los centrales. Cree que Abdennour debe jugar a dos toques y Mustafi no deber hacer más de lo que hace. «Yo no le pido a Mustafi que meta cinco goles. Cada uno a lo suyo. Hay que olvidarse de hacer más. Mustafi nos gusta porque tiene temperamento, pero muchas veces comete errores porque querer hacer más. Es un jugador que juega con el corazón y cuando quieres hacer más, a veces pones en dificultades a tus compañeros. Abdennour se estaba equivocando al tocar demasiadas veces el balón, el central si hace tres toques se acerca al error, él tiene que jugar a dos toques», aseguró.

Carboni también echó la vista atrás y reconoció que no echar a Quique al llegar a la Dirección Deportiva fue uno de sus «grandes errores». «Creo que fue uno de mis grandes errores . Tenía en mente otras cosas, pero tenía tantas ganas que no pensé que al pasar a Director Deportivo seguiría teniendo las mismas quejas con el entrenador. Al fin y al cabo, el Director Deportivo quiere hacer un equipo campeón y el entrenador quiere entrenar un equipo campeón».

En pleno curso de entrenador

«Estoy en el Valencia acabando el curso de entrenador. Es una faceta nueva y tengo mucha curiosidad. El hecho de ser un exjugador te da una cierta ventaja si lo sabes aplicar bien. He vivido muchas ideas y me gustaría aplicarlas. Sigo pensando que hablar bien a los jugadores es determinante para que rinda mejor. Llegar a la cabeza el jugador es fundamental», aseguró.