El Valencia no necesita practicar resurrecciones o invocar a los espíritus. Mestalla es uno y su afición la mejor bandera. Si confiar en el equipo se ha convertido en un acto de fe, el valencianismo es una garantía. En un momento de emergencia, habrá catarsis para unirse sin condiciones. De hecho, ya se está produciendo. Si la clasificación asfixia, la grada lo hará todavía más, empezando por el partido ante el Sevilla. Todas las partes se están conjurando para el domingo, el objetivo es recibir al equipo a lo grande.

La intención es empezar a ganar el partido desde el autobús. La Agrupació de Penyes Valencianistes ha citado a la afición a las 14:30 horas, se esperán 4.000 personas fuera y 50.000 gargantas dentro una hora y media después.

La intención es transmitir a los jugadores el espíritu que hace falta para competir en una recta final donde el descenso es la amenaza. La situación guarda ciertas semejanzas con lo vivido durante la temporada 2007/08, cuando el Valencia CF conquistó la Copa del Rey con Ronald Koeman, pero terminó apareciendo a seis puntos de la zona roja. El holandés fue despedido tras caer en San Mamés (1-5) y Voro tomó el mando del equipo con cinco jornadas por delante. Debutó ante Osasuna con triunfo, fue goleado en el Camp Nou y terminó arrollando las tres últimas jornadas ante Levante, Zaragoza y Atlético. Los problemas fueron muchos, pero el perfil de la plantilla era muy distinto; estaban Vicente, Albelda, David Villa, Silva, Mata, Angulo, Baraja, Marchena, Albiol, Cañizares€ Si bien, el motivo de la afición es el mismo: animar, ayudar y sumar. Con ese propósito, el club ha pensado en la Senyera gigante de la Peña Valencianista de Benetússer para que abandere y presida el recibimiento.

Vicente no se olvida

«La Peña Valencianista de Benetússer es del Valencia mande quien mande y si el equipo la necesita, la tiene», asegura el presidente Ramón Ferriols. Precisamente, la Senyera también fue protagonista en 2008, en aquella victoria ante Osasuna que marcó un punto de inflexión y permitió respirar a la plantilla.

Antes, en los prolegómenos, también hubo conjura. La afición estuvo con el equipo desde el Westin hasta Mestalla, la Senyera mando durante el camino ofreciendo imágenes para la historia.

Vicente Rodríguez, actual miembro de la secretaría técnica, no olvida lo sucedido: «Cuando salimos del hotel y vimos a todos los aficionados en la calle nos dimos cuenta de que el partido no se podía perder». El trayecto fue corto pero intenso. «El camino en autobús duró poco, pero nos impresionó a todos€ Te das cuenta de para quien estas jugando cuando te pones la camiseta del Valencia».

Las sensaciones del extremo izquierdo tienen que servir de inspiración ahora: «Cuando habló de ese partido de ese partido, siempre digo que empezamos a ganarlo en el autobús, con aquella bandera impresionante delante de nosotros».

El sentimiento está vivo y la Senyera preparada. Su padre es Toni Almudever, que compró la tela, hizo los planos y dirigió la confección en plena calle allá por el año 2000; son 250 metros cuadrados y 40 kilos de puro valencianismo. La gran bandera debutó en un partido contra el Barça, que se ganó con goles de Rufete y Aimar. Desde entonces, ha estado en los momentos buenos y en los malos, como en esa difícil temporada 2007/08 -aunque se ganó la Copa del Rey- o en la eliminatoria de Europa League ante el Atlético en 2012.

El viernes, abierto a la afición

El Valencia ha abierto el entrenamiento del viernes a la afición. Pako Ayestaran ya anunció en su presentación que entrenaría algún día a puerta abierta para que los aficionados pudieran conectar con el equipo. Este viernes será el día. La sesión comenzará a las 11:00 horas y se realizará en el estadio Antonio Puchades de la ciudad deportiva de Paterna. El club quiere crear el mejor clima posible de cara al trascendental partido del domingo. Los de Pako no están en disposición de pedir nada a Mestalla, así lo piensan los jugadores, pero lo que está claro es que van a necesitar un ambiente de apoyo como el que se vivió la noche del Valencia-Espanyol.