El Valencia le devolvió al Barcelona la derrota de Copa del Rey. ¡Cómo más duele! Ganándole en su estadio y complicándole la vida en la Liga. Porque donde las dan las toman. El equipo hizo historia. La afición vuelve a estar orgullosa de sus jugadores. Se lo dejaron todo en el campo. Hicieron todo lo que había que hacer para ganar en el Camp Nou. Con sufrimiento, orden agresividad, un Diego Alves inconmensurable y la suerte que todos los equipos del mundo necesitan para arañar puntos del Camp Nou. El Valencia hizo su partido. Aguantó el chaparrón inicial del Barça, se puso delante en el marcador con goles de Siqueira y Santi Mina y supo gestionar la ventaja en la segunda mitad con un Parejo sobresaliente y una pareja de centrales espectacular. Mustafi y Abdennour dieron la talla. Igual que el resto. Todos mostraron, como les dijo Pako Ayestaran, que son mejores jugadores de lo que han demostrado esta temporada. Llega tarde, pero es un placer. Un gustazo al cuerpo. Para los jugadores y, sobre todo, para la afición. Éste es el Valencia que todos queremos.

No era mala sobre el papel la propuesta de Pako Ayestaran. Presión alta, línea defensiva más adelantada, transiciones rápidas con André Gomes, Santi Mina y Rodrigo y ayudas. Muchas ayudas. Lo que pasa es que el Barcelona salió a arrollar. Quiso resolver el partido por la vía rápida para espantar las dudas que arrastraban los de Luis Enrique las últimas semanas. Salieron en tromba, tuvieron las ocasiones, pero no los goles. El Valencia aguantó el chaparrón de los primeros quince minutos con mucho sufrimiento y más Diego Alves. El brasileño fue el mejor de la primera mitad. Lo paró todo para el desespero del tridente azulgrana. Primero le sacó una mano a Messi a bocajarro tras una jugada individual de Luis Suárez. Todavía más espectacular fue la segunda intervención en una vaselina de Neymar. El portero había frenado la salida del Barça. El juego de los culé se enfriaba y partido comenzaba a ponerse 'caliente, caliente' para los valencianistas. Rodrigo avisó rozando el palo derecho de Bravo. El Camp Nou se asustaba y las dudas comenzaban a apoderarse del estadio y los jugadores del Barça. La buena noticia es que el Valencia sabía sufrir sin balón y no renunciaba a jugarla. Sabía tenerla. Así llegaron los goles. Con posesión y un último pase genial de André Gomes. Más mago que nunca. Siqueira incendió el partido. Llegó hasta la línea de fondo, la puso atrás y Rakitic hizo el resto con un autogol. El Barça solo podía reaccionar a balón parado. Lo hizo con un saque de esquina rematado de cabeza por Luis Suárez y una falta directa de Messi que acabó también en cabezazo del argentino en segunda jugada. Allí estaba Alves. Otra vez. Era el salvador. El Valencia se crecía. Y así, en medio de ese estado de confianza, llegó el segundo gol. El golazo. La obra de arte del Valencia. La que será recordada dentro de mucho tiempo. Al más puro estilo Barça. Tocando hasta aburrir en la posesión más larga del partido y matando. Esta vez con asistencia de Parejo. Mina mató. Como en Mestalla.

El Valencia se iba al descanso con un 0-2 histórico en el marcador. De lo que nadie dudaba es que los siguientes cuarenta y cinco minutos se iban a hacer muy largos. Mustafi y Abdennour se multiplicaron en defensa, Javi Fuego y Enzo Pérez encimaban e intentaban tapar todos los espacios habidos y por haber, Parejo corría y corría y encima todavía le quedaba criterio para lanzar los ataques. Chapeau. El Barça echó toda la carne en el asador. ¿Cómo no iba a hacerlo? Se estaba jugando la Liga. Llegaba y lo hacía con peligro. Al final, alguna tenía que entrar. Llegó desde la izquierda. Con centro de Jordi Alba y remate rato de Messi llegando desde atrás. Como más le gusta. Al Valencia no le temblaron las piernas. No fue el equipo frágil de la temporada. Estaba claro que iba a vender la derrota muy cara. Los de Pako no recularon. Todo lo contrario. Siguieron firmes. Bien asentados en el campo. Sin desordenarse y con refuerzos. Entraron Alcácer y Cancelo buscando la frescura perdida por el desgaste físico del partido. 4-5-1 era el plan... con Alves de portero claro. Diego seguía a lo suyo. ¡Qué mano! Rakitic ni siquiera se lo creía. El tiempo no corría para el Valencia y volaba para el Barça. El equipo amenazaba a la contra. A punto estuvieron de liarla tres veces. La más, de las botas de Alcácer. Rodrigo se la puso en bandeja, pero Paco no acertó en el remate. ¡Era el 1-3! El esfuerzo pasaba factura, pero el equipo no desfallecía. Resistía. Neymar perdía los nervios. Estaba desquiciado. Piqué, ya de delantero centro, la tuvo en los últimos minutos, pero definió mal. Solo faltaba la prolongación. Tampoco fue obstáculo. El Valencia había ganado. Hizo una piña en el césped. No es para menos. Hay que celebrarlo. ¡Por fin una alegría! Gracias, Valencia.

Ficha técnica

1 - Barcelona: Bravo; Sergi Roberto, Piqué, Mascherano, Alba; Busquets, Rakitic, Iniesta; Messi, Suárez y Neymar.

2 - Valencia: Diego Alves; Barragán, Mustafi, Abdenour, Siqueira; Javi Fuego, Dani Parejo, Enzo Pérez (Joan Cancelo, m.74); Santi Mina (Paco Alcácer, m.60), André Gomes; y Rodrigo (Gayà, m.87).

Goles: 0-1, m.26: Siqueira. 0-2, m.46+: Santi Mina. 1-2, m.64: Messi.

Árbitro: Fernández Borbalán (C. Andaluz). Mostró cartulina amarilla a Barragán (min.15), Piqué (min.35), Suárez (min.40), Parejo (min.51), André Gomes (min.68) y Neymar (min.86).

Incidencias: Partido de la trigésimo tercera jornada de la Liga BBVA disputado en el Camp Nou ante 88.667 espectadores.