En el instante en el que Mestalla apague los focos tras el partido del domingo ante el Villarreal se cerrará la etapa de Benito Mateo, bautizado como «el mejor jardinero del mundo» en una rueda de prensa por Nuno Espirito Santo. El club pierde de esta manera a uno de los trabajadores más carismáticos del día a día de Paterna, alguien considerado como uno de los gurús del césped, un hombre que se ha pasado noches enteras sin dormir dándole vueltas a la hierba tanto de la Ciudad Deportiva como del coliseo de l´Avinguda de Suècia. El Valencia ha depositado su confianza en la empresa catalana Royalverd, que venía siendo proveedora de un tiempo a esta parte y él ha decidido cerrar capítulo como valencianista y emprender otro camino profesional. Benito, que ha sido hombre de confianza de técnicos como Cúper o Pellegrini, ya ha firmado su finiquito y tiene distintas propuestas encima de la mesa. Se marcha cuatro años después de llegar del Málaga, lo hace con la conciencia tranquila del trabajo bien hecho y se queda con el cariño de la gente.

El césped de Mestalla, por lo tanto, cambiará de manos después de una temporada en la que ha dado un rendimiento fenomenal. Este pasado octubre, aprovechando el parón de la competición, Benito lideró una reforma en la que no solo se trajo césped de última generación procedente de Estados Unidos, sino que se decidió cambiar hasta el drenaje, vigente desde el Mundial de España, en 1982. Una medida que ha dado estabilidad al verde del Valencia, abocado a una dinámica de cambios en los últimos años.

Rompió la tendencia

La temporada pasada, sin ir más lejos, se cambió hasta tres veces: una a principio de campeonato; otra en noviembre después de que los jugadores y Nuno apuntaran al césped como motivo principal del empate con el Athletic -se cambió también el del Puchades y todo se realizó en tres días, con 20 camiones que llegaron desde Burdeos-. Tras la Monster Jam y el multitudinario concierto de Marc Anthony al que acudieron 20.000 personas, en verano se volvió a sembrar. Tras la marcha de Benito la empresa Royalverd controlará todo lo relativo al verde, al igual que hace ya en más de diez clubes de Primera, entre ellos Barça, Espanyol o Levante. La compañía, especializada en los tepes, se encargó además de la hierba de siete de los doce estadios sede en el pasado Mundial de Brasil, entre ellos el de Maracaná.