La recaída de Denis Cheryshev ha abierto el debate: ¿fichar o no fichar? Los problemas en el recto anterior de su pierna izquierda han encapotado una respuesta que estaba clara hasta hace unas pocas semanas. Por calidad encaja y tratar su incorporación definitiva estaba presente en las prioridades de García Pitarch, a la espera del OK de Peter Lim. Sobre el campo, ha marcado la diferencia cuando ha estado operativo. Por su parte, el futbolista ha manifestado su intención de continuar en el Valencia. Además, el ruso ha entrado perfecto en el vestuario y los hechos demuestran que es un tipo súper querido: la foto de grupo con su camiseta tras la victoria en el Camp Nou „donde la grada culé le hizo protagonista de su banda sonora por la alineación indebida con el Real Madrid en aquella dura derrota en Copa„ o la sucesión de mensajes de apoyo de la plantilla tras su frustrante reaparición del domingo ante el Villarreal: duró menos de 20 minutos, tras caer lesionado ante el Atlético de Madrid hace dos meses. La recuperación de esa rotura muscular ha ido poquito a poquito; iba a reaparecer ante el Barça, luego ante el Eibar, después ante el Getafe? Problema de cicatrización, argumentó Ayestaran. Las pruebas médicas de ayer han confirmado una microrrotura en la zona afectada. Un palazo para Denis. La cuestión ahora es si el extremo izquierdo volverá a competir como valencianista, si es un hasta pronto o un adiós.
La película era perfecta: llegó a última hora en el mercado de invierno y encajó rápido. Mente limpia y mucha hambre de fútbol. Fundamental en las victorias ante Espanyol y Málaga, su energía nueva generó un impacto inmediato. Marcó tres goles, el último ante el Atlético, el partido „con derrota„ de la fatídica lesión. No pudo hacer más en menos tiempo. Negociar su fichaje con el Real Madrid estaba en el guión de García Pitarch. Cheryshev ya dijo que continúa encantado. Después de lo sucedido, quedan por actualizar las prioridades de los técnicos. Siempre, bajo una condición esencial: el precio de la operación, que también influye. El margen de maniobra de Suso García Pitarch para el mercado también condiciona e iba a condicionar los términos de su fichaje. El ruso finaliza contrato en 2017 y eso abre una ventana. Con un sólo año de contrato por delante, el Real Madrid pierde fuerza en el trato. Puede ser una oportunidad. Esa situación hace que equipos como Sevilla y Villarreal, sobre todo los amarillos, permanezcan interesados.
Si Denis Cheryshev se mantiene vivo como objetivo del Villarreal es porque la apuesta guarda bastantes más certezas que riesgos. De amarillo, precisamente, completó una temporada de alto nivel: 40 partidos, siete goles y 10 asistencias. El zurdo fue fundamental en el juego de presión y ataque rápido de Marcelino. Explotó su zancada, su buena pierna para centrar, su llegada y su capacidad para asistir.
Explosivo, para bien y para mal
En su última temporada en el RM Castilla voló a todos los niveles y no se le conoce dolencia de importancia: 11 goles y ocho asistencias, partidos con la Sub21 rusa y la Eurocopa de la categoría a final de curso. Las dudas sobre el físico de Cheryshev planean desde hace dos cursos. En el Sevilla, en el salto a Primera, terminó inédito, tras encadenar problema tras problema. Al club de Nervión estuvo a un milímetro de regresar en el pasado mercado de invierno. Es una pista.
Al Valencia llegó tras participar muy poco con el Madrid y quizás eso le ha pasado factura a nivel físico. Los problemas en el recto anterior de la pierna izquierda, que sólo le han dejado participar en ocho de 20 partidos posibles, como valencianista se hicieron visibles como amarillo. En Mestalla han machacado su ilusión. En 2014/15 le costaron 10 partidos. Primero, fue una microrrotura miotendinosa grado I-II en el recto anterior del cuádriceps izquierdo, en marzo justo antes de la ida de Europa League ante el Sevilla. Un mes después, reapareció ante el Getafe y frente al Córdoba, de nuevo, microrrotura en el recto anterior de la pierna izquierda. Terminó la temporada el 19 de abril, a seis jornadas del final.
