El Valencia Mestalla sacó los colores al primer equipo. Con goleada. Fue 1-4 en solo cincuenta minutos y lo peor es que pudieron ser más. Para unos solo será un partido amistoso de post-temporada. Para otros, la mayoría, fue la mejor metáfora del Valencia desalmado y desganado que ha fracasado esta temporada. El mejor reflejo de lo que muchas veces se vio este año. Ni intensidad, ni motivación, ni hambre, ni siquiera orgullo personal. Así es como se comportó el Valencia en su amistoso contra el filial blanquinegro. Es comprensible que los jugadores estén en ‘modo vacaciones’ con la temporada ya agotada. Lo que no es normal es que ayer se dejaran llevar y no reaccionaran a medida que encajaban goles de los canteranos. Eso es lo que sucedió este miércoles en la ciudad deportiva de Paterna. Un equipo quería. El otro no. El resultado, una humillante derrota. Una más. La última por fin de la temporada.

«¿Quieres ser tú el árbitro?», le preguntaba el preparador físico a Phil Neville. «No». El inglés le cedió el honor a él decorosamente. «¿Árbitro, con nosotros eh?», bromeaba Siqueira con Viela. Así, entre risas, comenzó el amistoso. David Caneda, el segundo de Pako Ayestaran, alineó a Sivera; Barragán, Vezo, Charlie, Siqueira; Danilo, Parejo, Carlos Soler; Cancelo, Rodrigo y Negredo.

Curro Torres, por su parte, jugó de inicio con Álex Sánchez, Nacho Vidal, Akapo, Diallo, Caballo; Rai, Quim Araujo, Fran Villalba; Aridai, Nacho Gil e Iban Salvador. Los canteranos fueron superiores desde el minuto uno. Pusieron más actitud en el campo y también más fútbol para golear (4-1) al primer equipo con ‘hat-trick’ de Aridai y gol de Villalba y llevarse la victoria con todo merecimiento. Sin oposición alguna. Aridai firmó muy pronto el primero con una gran jugada personal que dejó en evidencia a Vezo. Quim y, sobre todo, Fran se adueñaron del balón. El Mago del Cabanyal recuperó su mejor versión a los ojos de José Ramón Alexanko. Jugó, hizo jugar y bregó como el que más. Así llegó el segundo. Robó un balón a Vezo y subió el segundo al marcador. Lo peor es que las caras de los jugadores del primer equipo no cambiaba. Recortaron distancias gracias a la calidad de Parejo a balón parado. La reacción se quedó en una jugada aislada de Cancelo y un magistral gol de falta de Parejo. Como siempre. La primera parte se cerró con un rifirrafe. Cancelo y Negredo le recriminaron a Iban Salvador una fuerte entrada. Estaba claro quien metía el pie y quien no. El partido se fue al descanso con 1-2.

Los primeros 25 minutos del Valencia fueron malos. Los segundos, decepcionantes. Curro refrescó el equipo con la entrada de Lato, Zahibo, Tropi, Fernando Cano, Víctor Ruiz y Sito y las distancias entre un equipo y otro todavía se hicieron más grandes. Aridai cambió de posición en el descanso. Si en la primera mitad hizo daño desde la banda derecha, en la segunda hizo sangre como delantero centro. El canario puso la puntilla con dos goles más. Nacho Vidal encontró una autopista en la banda de Siquiera y sirvió un balón en bandeja para que Aridai lo empujara al fondo de la red. Era el segundo de su cuenta particular. El tercero llegó al aprovechar un rechace del portero. 1-4. Lo triste es que nada cambió. El segundo de Pako veía impotente el comportamiento de sus jugadores. Solo el ‘fichaje’ Carlos Soler intentaba tirar del carro del primer equipo. Ver para creer. Para esto es mejor que empiecen las vacaciones.