Alexander y Marianela Szymanowski son dos hermanos en la élite del fútbol. Él fue el héroe del histórico ascenso del Leganés. Ella persigue en el Valencia CF la alegría que el balón le ha dado en cuentagotas por culpa de las lesiones. En su primera titularidad, en Sant Adrià ante el Espanyol, rubricó con su tanto „su estreno goleador como blanquinegra„ la segunda victoria consecutiva del VCF Femenino, colíder de la nueva Liga Iberdrola. Este domingo tendrá el «corazón partido». Por un lado, el escudo que ahora defiende con pasión y con el que rápidamente se ha identificado. Por otro, el amor a su hermano, uña y carne, su principal apoyo, sobre todo en esos dos años en los que el menisco estuvo a punto de hacerle tirar la toalla, un calvario de recuperación en Huelva junto a Alexander y también cuando él militaba en el Brondby. Será un Leganés-Valencia de muchas emociones: «Es difícil porque a mi hermano siempre quiero que le vayan bien las cosas, pero también sé que el Valencia no anda demasiado bien en este inicio de temporada y necesita la victoria. No sé hacia donde tirar».

Aunque nacidos en Buenos Aires, el apellido Szymanowski es de ascendencia polaca. Con 12 y 10 años respectivamente (ahora tienen 27 y 25), Alexander y Marianela llegaron a España. Su familia se trasladó a Madrid, a la localidad de Collado Villalba, y allí empezó todo. Siempre han vivido muy unidos, de hecho Marianela confiesa que es la fan número uno de su hermano junto con su otra hermana pequeña, que aunque no se dedica al fútbol les sigue siempre de cerca.

Alexander es un trotamundos del fútbol, sobre todo del madrileño. Unión Adarve, Rayo Majadahonda, Atlético Leones de Castilla, Alcobendas, San Sebastián de los Reyes o Antequera aparecen en su hoja de servicios. Aunque donde empezó a marcar diferencias fue en el Alcalá, el club que le puso en el punto de mira del Rayo Vallecano, aunque acabó firmando por el Recreativo de Huelva. De allí fue jugador de Europa League en el Brondby y después de tres temporadas en Dinamarca regresó a Madrid para hacer historia con el Leganés. En todas estas idas y venidas de equipo, Marianela siempre ha estado al lado de su hermano cuando ha podido o lo ha necesitado como en su larga lesión de rodilla vivida en Huelva y Dinamarca.

Pese a que fue titular el jueves en la victoria en Riazor, Alexander no está teniendo una regularidad de minutos por una pretemporada en la que los problemas físicos le han jugado una mala pasada. No hay nadie que tenga más fe en él que Marianela, que está segura de que en LaLiga Santander será igual de determinante que en la División de Plata. «Ha tenido una pretemporada complicada por molestias musculares, pero poco a poco va cogiendo el ritmo del equipo y va teniendo minutos», considera la ´11´.

Marianela tiene más experiencia que su hermano en la máxima categoría. Incluso jugó Champions con el Rayo Vallecano ante el Peamount United (1-0). Antes militó en el Atlético „su hermano también pasó por la cantera del Atlético„ y ahora ha encontrado la estabilidad deportiva: «Estoy feliz en el Valencia, las compañeras me han recibido muy bien y como siempre digo, la base para un buen equipo es un buen vestuario, y lo tenemos».

Lo cierto es que estaba pidiendo a gritos un momento. Tanto que el curso pasado, por una lesión de hombro, desconectó de la competición y solamente prestó atención a su actual club en su magnífica Copa de la Reina. Fue duro el último percance y aún más el anterior. Menos mal que ahí estuvo su hermano para hacer más llevadera la recuperación. Olvidados los sinsabores, Marianela se siente como en casa a las órdenes de su paisano Cristian Toro y formando parte de una plantilla capaz de todo. Y lo hace con el ´11´ a la espalda y el apellido Szymanowski como su hermano para ratificar más si cabe su unión y ahora además en Primera.